La presidenta Cristina Fernández de Kirchner arribó anoche a Quito, Ecuador, para participar de la Cumbre de Jefes de Estado de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), además de asistir a la asunción del segundo período del presidente anfitrión, Rafael Correa. Los puntos fuertes del encuentro serán el tratamiento del golpe de Estado en Honduras y el acuerdo de Colombia con Estados Unidos para desplegar bases militares en su territorio. Como parte de la gira, la Presidenta irá también a Venezuela, donde se entrevistará mañana con Hugo Chávez.

Aunque el motivo formal de esta tercera reunión ordinaria de la Unasur es el traspaso de la presidencia pro témpore del bloque, que la chilena Michelle Bachelet entregará a Correa, hay dos temas que serán centrales en la agenda del encuentro: la instalación de bases militares norteamericanas en Colombia y la situación en Honduras, a más de un mes del golpe de Estado que derrocó a Manuel Zelaya.

Fuentes del Gobierno aseguraron a Página/12 que la postura nacional sobre el despliegue militar estadounidense en la región será la de “acompañar los reclamos de los países limítrofes, Brasil, Venezuela y Ecuador”, sin tomar un rol activo, a la espera de que la cuestión sea planteada por Lula da Silva, Hugo Chávez o Correa. Si bien las fuentes aclararon que no era “una posición en contra de los Estados Unidos”, estimaron que “la ampliación de su presencia militar genera una sensación de beligerancia regional”.

Anticipando el tenor de la discusión, el canciller venezolano, Nicolás Maduro, dijo que “lo que pretende hacer Colombia es una bofetada a toda Sudamérica”.

El conflicto de Honduras tuvo también sus primeras declaraciones políticas cuando, ayer, los cancilleres del bloque anunciaron que no reconocerán “ninguna convocatoria a elecciones del gobierno de facto”. El presidente depuesto, Zelaya, formará parte de la Cumbre, mientras que el colombiano Alvaro Uribe, de tensa relación con Correa, estará ausente con aviso, ya que decidió desafectarse de la reunión luego de que el brasileño Lula solicitara la convocatoria del Consejo de Defensa del bloque para tratar el acuerdo militar entre Washington y Bogotá. También faltará a la cita el uruguayo Tabaré Vázquez.

A pedido de Cristina Fernández, el ministro de Salud, Jorge Manzur, se reunió con el canciller Jorge Taiana para detallar los acuerdos a los que habían llegado los ministros del área de la región para incluirlos en la declaración final del encuentro. Se apunta a la necesidad de flexibilizar las patentes medicinales en el marco de la pandemia de gripe A, para facilitar su acceso a la mayor cantidad de gente.

Luego de la reunión, la Presidenta asistirá al acto de reasunción de Correa, reelecto por otros cuatro años (ver más información en la página 18). Además de los presidentes de la región, asistirán otros jefes de Estado, entre los que se destaca el cubano Raúl Castro.

Poco después de que el Tango 01 despegara del aeroparque metropolitano con rumbo a Quito, otra delegación argentina, encabezada por los ministros Julio De Vido (Planificación) y Déborah Giorgi (Producción) junto a medio centenar de empresarios, viajó a Venezuela para preparar el terreno para el martes, cuando CFK arribe a Caracas. El objetivo de la delegación es aprovechar la decisión venezolana de restringir las importaciones colombianas para ganar parte de ese mercado. Chávez ya anunció que aumentará el cupo de carne vacuna y lácteos, pero también se busca abrir las puertas para exportar autopartes, medicamentos, calzado y cosméticos por el valor de 4 mil millones de dólares.