El empresario Sergio Cirigliano y el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, declararon en la causa en la que se investiga si el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime y el propio Schiavi, que lo sucedió en el cargo, recibieron dádivas de empresas que debían controlar. En el caso están bajo la lupa una serie de viajes aéreos que realizó Jaime, la mayoría con destino a Brasil, y uno hecho por Schiavi, que habrían sido pagados por el grupo Cirigliano, dueño de Trenes de Buenos Aires (TBA). En el descargo que realizó ayer, el empresario alegó que algunos de los viajes fueron “vuelos de demostración” de empresas de taxis aéreos que los ofrecieron “de manera gratuita”. De otros reconoció que fueron pagados por compañías en las que él tiene participación, pero sostuvo que luego un estudio brasileño les reintegró el gasto, es decir que según su versión sólo hicieron de intermediarias.

Cirigliano buscó despegarse así de las acusaciones que lo señalan como sospechoso de haber pagado la mayor cantidad de los viajes cuestionados. Interrogado por el juez federal Claudio Bonadío, reconoció que hizo dos viajes a Río de Janeiro con Jaime, en uno de los cuales también estuvo Schiavi, pero sostuvo que no fueron viajes de placer, sino para tratar con funcionarios brasileños cuestiones vinculadas con inversiones en subtes y ferrocarriles. Finalmente sostuvo que ninguna de las empresas de su propiedad que aparecen pagando viajes recibe subsidios del Estado.

Schiavi aparece menos comprometido en el caso. Es investigado por un solo viaje, en septiembre de 2006, a Río de Janeiro. Ayer, aclaró que participó “como invitado de una comitiva oficial” que visitó las obras de la red de subterráneos en Río de Janeiro y que no tuvo “ningún tipo de intervención” en la organización del viaje. En ese momento él era ministro de Obras Públicas porteño y –declaró ayer– fue invitado por Jaime “para generar contactos con las autoridades” que tenían a cargo el subte de Río de Janeiro. “Desconozco todo lo atinente a la aeronave utilizada para realizar dicho traslado”, le dijo al juez. Durante la jornada declaró además Manuel Vázquez, un ex asesor de Jaime.

La causa se abrió por una denuncia del ex titular de la Fiscalía de Investigaciones Administrativas (FIA) Manuel Garrido, sobre una docena de viajes con destino a ciudades del país, Brasil y Uruguay. Según la denuncia, “habrían sido realizados –en especial algunos– en beneficio exclusivo y privado del secretario de Transporte Jaime y un grupo de personas” que integrarían “su núcleo íntimo de relaciones personales”. Jaime, quien dejó el cargo el 30 de junio pasado, será el próximo en prestar declaración indagatoria, mañana.