Además de la lluvia de ayer, el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, no para de abrir nuevos frentes de tormenta en la ciudad. Luego de una reunión con el ministro de Educación, Esteban Bullrich, y ante su falta de respuesta a una serie de exigencias iniciadas por los docentes en marzo –cuando firmaron un acuerdo salarial y laboral–, siete gremios docentes de Buenos Aires difundieron un comunicado en el que informaron que “habiendo fracasado las negociaciones que se vienen manteniendo desde junio entre los sindicatos docentes, se resolvió poner a consideración de los cuerpos orgánicos la realización de un paro, para la próxima semana, en todas las áreas y niveles de cada entidad”. “Macri redujo el presupuesto de infraestructura edilicia de 215 millones en 2008 a 145 millones en 2010”, señaló a Página/12 Eduardo López, secretario general de UTE-Ctera. Además, “duplicó el presupuesto en subsidios a la enseñanza privada de 400 millones en 2008 a 800 millones en 2010”, agregó.

Durante la reunión que mantuvieron con Bullrich ayer “nos dijo que no tenía respuestas a nuestro reclamo”, reveló López. “Por eso decidimos convocar a un plenario para el próximo martes, donde vamos a proponer al cuerpo de delegados un paro de veinticuatro horas”, insistió. La medida de fuerza, pensada para el 24 de agosto, profundizará el reclamo de “estabilidad de todos los docentes interinos de nivel medio y terciario, el pago en tiempo y forma de los sueldos, la solución a problemas de infraestructura edilicia, el no cierre de grados y la creación de nuevas escuelas y jardines”.

Si la iniciativa prospera en el plenario de la próxima semana, y en caso de no haber un gesto del Gobierno de la Ciudad que demuestre intención política de dar respuesta a los reclamos, el macrismo recibirá la primera medida de fuerza del gremio docente en lo que va del año. “Este sería el primer paro del año”, subrayó López y añadió que, desde marzo, se tuvo “voluntad política de respetar el plazo de 60 días” para que el Gobierno de la Ciudad “solucionara nuestras demandas”.

López estimó que el 26 por ciento del Presupuesto que el Ejecutivo porteño destina a Educación es “de los más bajos del país”. “Bullrich plantea que se está negociando con Hacienda una reasignación de partidas para dar respuesta a la demanda educativa –contó–. Hacemos responsable al jefe de Gobierno, Mauricio Macri, por esta situación. El encargado de distribuir el presupuesto de la ciudad es él y consideramos que prioriza un bache en lugar de un alumno, o una ornamenta sobre una escuela.”

Al cierre de esta edición, de los 15 gremios de la ciudad, la propuesta era respaldada por las asociaciones de Docentes de Educación Física (ADEF), de Educadores Porteños (AEP), del Magisterio Técnico (AMET), la Unión Argentina de Maestros y Profesores (Camyp), el Sindicato de Educadores de Buenos Aires (Sedeba) y la Unión de Docentes Argentinos (UDA). El motivo principal del paro es “más presupuesto en educación”, porque priorizamos la “educación pública” como garante de la “igualdad de oportunidades”, concluyó López.