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El gremio docente UTE-Ctera denunció que la gestión PRO intentó amedrentar a los docentes con un operativo de auditorías, en el que buscaron establecer por qué varios directivos y supervisores no entregaron los nombres de los que hacían paro. En el distrito 11, de la zona de Flores, enviaron a veinte auditores del Ministerio de Hacienda a revisar las faltas y los ausentes justificados. “¿Cuándo se hicieron las últimas auditorías de este tipo? Cuando trabajaba Ciro James en el Ministerio de Educación”, recordó el secretario general de UTE, Eduardo López. Los docentes denunciarán el apriete con una movilización a la Legislatura el martes. Además, directores de distintas escuelas le enviaron una carta al ministro de Educación Esteban Bullrich, en la que le plantearon que no “forman parte de la patronal”.

La Capital se divide en 21 distritos escolares. Cada uno tiene un supervisor: el del distrito 11 es Norberto Ares. Durante los paros, Ares se negó a entregar los nombres de los que hacían huelga, mientras el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, amenazaba con descontar los días con la frase “no podemos pagarle a quien no trabajó”. Desde los gremios, recuerdan una y otra vez que la gestión PRO tiene dos fallos en contra de la Justicia que les ordenan devolver el dinero de los descuentos que hicieron en el conflicto del año pasado.

El viernes pasado, las escuelas del distrito escolar 11 recibieron la visita de veinte auditores del Ministerio de Hacienda, en lo que UTE consideró “una maniobra de amedrentamiento”. “Fueron a casi todas las escuelas, pidieron registros de los libros de firmas, números de documentos de la gente. Fue casi a la misma hora, al mediodía. Crearon un clima funesto, de terror. Me preocupan las metodologías que están usando”, planteó el supervisor Ares a Página/12. “Se llevaron fotocopias de un montón de documentación: justificaciones de licencia, los que habían pedido ausente con aviso. Cuando nos quedamos después de horario conteniendo chicos, no nos vienen a auditar”, remarcó. “Yo tenía una reunión de coordinadores y en varias escuelas pidieron la justificación de dónde estaban los directores. Tengo tres grados con problemas de techos y los tengo reubicados. No tenemos respuestas. Somos defensores de la escuela pública”, consideró.

Los directores de escuela que están nucleados en UTE enviaron una carta a Bullrich y le pidieron una reunión. “Tenemos claro que nosotros hemos ganado concursos públicos, que no le debemos los cargos a ningún gobierno de turno, que no seremos instrumento de disciplinamiento de maestros, profesores y estudiantes para que silencien sus voces”, le plantearon al ministro en la misiva. “Los directivos estamos sorprendidos por la celeridad en que se ha implementado un sistema para descuentos. Esta celeridad no se aprecia en los trámites para que los docentes cobren de inmediato cuando empiezan a trabajar”, le remarcaron. Y reclamaron que cesen los intentos de amedrentar a los docentes.

“Si fueron auditores directamente de Hacienda, es una orden de Macri. Así como pedían la lista identificatoria de los alumnos, ahora piden las de los docentes, aunque la Justicia porteña estableció que no se pueden descontar los días”, advirtió López. El gremio convocó a una movilización para el martes a las 12.30 a la Comisión de Educación de la Legislatura porteña, donde se solidarizarán con el supervisor y denunciarán “las políticas persecutorias del jefe de Gobierno y el ministro de Educación”.