El sector de la Central de los Trabajadores de la Argentina (CTA) que responde al dirigente docente Hugo Yasky difundió ayer desde Ginebra, donde participa de la reunión de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), que el juez laboral Pablo Candal aceptó la apelación presentada por el sindicalista y prorrogó el mandato de las autoridades que integraban la conducción antes de las elecciones del 9 de diciembre. “Queda todo suspendido hasta que la Cámara decida y se ratifica la prórroga del mandato, lo cual implica refrendar lo que vinimos planteando desde hace meses pese a que desde el sector de Micheli se intentó dibujar, con la complicidad de Clarín y La Nación, como que la Justicia les dio a ellos la razón en forma definitiva y lo puso al frente de la CTA”, dijo Yasky a Página/12 desde Suiza.

El magistrado había aceptado, en primera instancia, la presentación realizada por el sector de la corriente que encabeza el jefe de los estatales, Pablo Micheli, convalidando las elecciones complementarias del 9 de diciembre, medida que fue apelada por Yasky. Ante esa situación, ahora Candal hizo lugar a la presentación realizada por Yasky y giró la causa a la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, a la vez que ratificó la prórroga del mandato de la conducción de la CTA. “Terminó de estallar la burbuja que armaron, porque es el mismo juez irreprochable que les concedió a ellos el tema de que no iba a haber elección complementaria, de modo que no pueden ahora desconocer esta decisión de concedernos la apelación”, agregó Yasky en diálogo con este diario. “Acá en la OIT vinimos los dos sectores que teníamos que estar, pero no para convertirla en un tribunal de alzada, aunque hoy la mayoría de las delegaciones tiene claro que eso de venir a victimizarse en Ginebra era sólo una especulación”, completó. “En esta Conferencia se están discutiendo situaciones horrorosas sobre atropellos a trabajadores, realidades de esclavitud y hasta asesinatos de dirigentes sindicales, políticas que convierten en tierra arrasada a las asociaciones sindicales y el secuestro de dirigentes, de modo que venir a Ginebra a plantear un conflicto intrasindical con la pretensión de que se convalide a ese sector como única representación de la CTA es una barbaridad que generó fastidio y rechazo en la mayoría de las delegaciones”, había dicho más temprano.

Para el líder docente, “hay buenas expectativas” respecto de lo que diga la Cámara de Apelaciones. “Tenemos muchas posibilidades porque planteamos que se pueda volver a votar, no dependemos de un fallo judicial para quedar aferrados a los cargos, queremos un fallo para volver a votar de manera democrática y transparente, que lo hagan los 220 mil afiliados que no lo pudieron hacer y cerrar este litigio con los votos, no con un fallo, que los jueces sean los trabajadores”, dijo Yasky.

En tanto, el sector de Micheli aprobó ayer por unanimidad, durante el Congreso Nacional Federal en Mar del Plata, la convocatoria a un paro nacional para mañana, en reclamo del 82 por ciento móvil para las jubilaciones y la universalización de la Asignación por Hijo. “Hace falta una medida sindical para que sirva de presión al gobierno nacional y termine de reponer una conquista que una vez tuvimos los argentinos”, dijo Micheli.