“Trasladar un conflicto a la ciudad de Buenos Aires no tiene sentido y tiene el claro objetivo de un apriete”, consideró el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, al referirse a la manifestación realizada por el gremio de choferes de camiones frente a las oficinas porteñas de la empresa Camuzzi, por el despido de 200 trabajadores en Chubut y en repudio a la represión policial de la semana pasada en Trelew. El funcionario agregó que en la Argentina “ya no tiene sentido esta forma de canalizar el conflicto”, recordó que aún rige la conciliación obligatoria y está pendiente una reunión para hoy en la sede de la cartera laboral. Por su parte, Pablo Moyano, número dos del gremio Camioneros e hijo del jefe de la CGT, Hugo Moyano, acusó al Gobierno de aplicar “una política de ajuste” y reconoció que el diálogo de la central obrera con la presidenta Cristina Fernández continúa interrumpido.

Pablo Moyano había advertido que si el gobierno nacional no soluciona el conflicto gremial con Camuzzi, el próximo viernes habrá una “gran movilización con más de 30 mil camioneros al Ministerio de Trabajo y después a la Plaza de Mayo”. Además, el hijo del titular de la CGT le exigió al titular de la cartera laboral que “ponga la cara a favor de los trabajadores”. Tras escuchar que Tomada había dicho que la protesta fue para “perturbar, jorobar y marcar la cancha”, el gremialista le respondió duramente al subrayar que “hay 200 despidos y este señor (por Tomada) cuando los recagaron a palos a los trabajadores no dijo nada”. Varias personas resultaron heridas la semana pasada en Trelew cuando la policía reprimió una manifestación de camioneros. Moyano le envió otro mensaje al funcionario: “Que se deje de hablar de las metodologías de los camioneros, acá hay gente que no tiene plata para comer”.

Además de calificar las iniciativas de Camioneros como un “apriete”, Tomada salió al cruce de las protestas contra la decisión de la distribuidora de gas patagónica Camuzzi Gas del Sur de no renovar la concesión a la empresa proveedora del servicio de distribución postal Correo Sur SRL. La firma, por su parte, aseguró que no hubo despidos, sino la finalización de un contrato con la firma Correo Sur SRL, y advirtió al sindicato de Camioneros, que bloqueó el ingreso a la sede de Puerto Madero, que direccionan “indebidamente” sus acciones de protesta. El ministro de Trabajo enfatizó: “Nosotros no queremos confrontar. Queremos poner la mesa de negociación para resolver estos problemas. ¿Por qué es necesario este paso cuando estamos en período de conciliación obligatoria allá en el sur? Y es allá donde tendríamos que seguir todo el proceso de la negociación para encontrar una solución que, por supuesto podemos encontrar, como lo venimos haciendo todos estos años”. En ese sentido, agregó que el conflicto “tiene que ver con una situación de transporte de facturas en el sur, propio de las provincias patagónicas y con una licitación que culminó. Tenemos las puertas abiertas para el diálogo a pesar de esto”, precisó en alusión a las movilizaciones.