El fiscal general de la causa AMIA, Alberto Nisman, rechazó las acusaciones de “sionista” lanzadas por Irán y ofreció “dar un paso al costado” si eso permite que los sospechosos iraníes de haber participado en el ataque a la mutual judía “se entreguen” a la Justicia argentina. “Yo los invito que de una vez por todas discutan argumentos, en vez de discutir a las personas. Si el problema es Nisman, que los acusados se entreguen a la Justicia, que vengan presos a la Argentina, que si yo tengo que dar un paso al costado porque el problema soy yo, lo doy, porque tengo la tranquilidad de que todas las pruebas están sentadas por escrito, en el expediente”, sostuvo.

La AMIA y la DAIA, por su parte, se unieron al rechazo a las acusaciones iraníes contra Nisman y afirmaron que “hace excelentemente su trabajo de investigación” en la causa por el atentado contra la mutual, que dejó 85 muertos en 1994. El presidente de la AMIA, Guillermo Borger, advirtió que fueron “improcedentes e incalificables” las declaraciones iraníes que definieron a Nisman como “sionista”. En tanto, el secretario general de la DAIA, Jorge Knoblovits, sostuvo que Irán acusa “injustamente a cualquiera que se oponga al memorándum” de entendimiento que firmó con la Argentina para indagar a los acusados por el atentado.

A través de un vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores citado por la agencia oficial IRNA, el gobierno de Irán rechazó el lunes el dictamen de Nisman que acusaba a ese país de llevar adelante un plan de infiltración en América del Sur para patrocinar actos terroristas en la región. “Teniendo en cuenta el pasado de ese individuo, no otorgamos ninguna importancia a la declaración”, sostuvo el vocero iraní, quien ponía de relieve el supuesto “carácter sionista” del fiscal que encabeza la Unidad de Investigaciones de la AMIA desde 2005.