El ex secretario de Transporte Ricardo Jaime seguirá en condición de prófugo por consejo de su defensa, a pesar de haber sido declarado “en rebeldía” por el juez federal Claudio Bonadío. Este magistrado había pedido su captura el viernes al procesarlo con prisión preventiva en una causa por presuntas contrataciones irregulares con pagos de sobreprecios para realizar mejoras en la línea Belgrano Cargas. Ayer Bonadío concedió la apelación presentada por los abogados del ex funcionario y ahora deberá resolver la Cámara Federal. Sin embargo, se complicó la situación de Jaime por otro pedido de detención emitido por un fiscal cordobés.

En base al consejo técnico de su abogado, Andrés Marutian, el ex secretario de Transporte anunció que se pondrá a disposición de la Justicia recién luego de que los camaristas Jorge Ballestero y Eduardo Freiler resuelvan su pedido de eximición de prisión. Marutian también presentó un pedido de anulación del procesamiento que será tratado por la Sala I de la Cámara federal porteña, pero recién cuando se reanude la actividad normal tribunalicia, a partir del lunes 29 de julio.

El abogado Marcelo Brito, que asesora a Jaime en una causa en Córdoba, reveló que recibió una comunicación telefónica de Jaime en la cual le consultó sobre la orden de captura pedida por el fiscal federal de Cámara Maximiliano Hairabedian, porque el 30 de julio debe ser juzgado por tentativa de sustracción de pruebas durante un allanamiento. En declaraciones periodísticas, Brito dijo que desconoce el paradero del ex funcionario kirchnerista, pero que continuará prófugo por consejo del profesional que lo defiende en la causa de Bonadío.

En tanto, el fiscal Hairabedian anticipó que si Jaime sigue en rebeldía “no se podrá realizar el juicio” en su contra previsto en Córdoba para el martes 30 de julio por supuesto ocultamiento de pruebas en la causa sobre presunto enriquecimiento ilícito. “En un allanamiento en su casa de Villa Carlos Paz, Jaime intentó ocultar unas tarjetas personales que lo comprometían, pero fueron secuestradas aunque, estando bajo custodia del Estado, desaparecieron en el viaje de Carlos Paz a la fiscalía 2 en Buenos Aires”, explicó el fiscal.