La fiesta se instaló en el exclusivo complejo Pipa de Tigre recién pasadas las 22, una hora después de que se comenzaran a conocer los primeros datos oficiales de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias de ayer, y 40 minutos antes de que el líder del Frente Renovador e intendente de Tigre, Sergio Ma-ssa, saliera a festejar el primer puesto en la provincia. “Hemos dado el primer paso en la construcción de un nuevo frente político”, sostuvo frente al micrófono con apenas un 20 por ciento de las mesas escrutadas y poco menos de cinco puntos por sobre el Frente para la Victoria. Pasada la medianoche, con un porcentaje mayor de mesas contabilizadas y de votos en su haber, dejó la humildad de lado en una conferencia de prensa que interrumpió un minirrecital de Pablo Lescano y Damas Gratis: “Eramos David y Goliat en la lucha contra el Estado nacional. Tan mal no nos fue, el respaldo que recibimos es muy grande”. La cifra le inspiró confianza. Luego de agradecimientos, menciones al Papa y dedicaciones a “la clase media argentina”, no se aguantó y pensó en 2015: “Esta es una semilla que germina con destino a octubre y la mirada puesta en el futuro de la provincia y de la Argentina”. Sin embargo, se preocupó por mostrar “humildad” al asegurar que no toma el resultado de ayer como “un cheque en blanco”. “Soy un admirador de Mostaza Merlo, paso a paso”, concluyó.

El clima instalado en el bunker massista se mantuvo frío durante toda la jornada, a pesar de que los rumores fueron favorables desde las primeras horas del cierre de las mesas. Los primeros vaticinios hablaban de uno o dos puntos de diferencia sobre el oficialismo. Entrada la tarde, los más esperanzados superaban los cinco. La llegada de los candidatos a diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires fue cronometrada a cuentagotas y por orden de intensidad política. Mirta Tundis llegó tan temprano que pasó inadvertida para la prensa. Adrián Pérez inauguró los micrófonos al expresarse “contento con la campaña hecha”. Siguieron Fabián Gianola, Felipe Solá y José Ignacio de Mendiguren. El gremialista Héctor Daer lanzó la primera canchereada, pasadas las 19. “Estamos ganando y por un porcentaje muy superior al que se rumorea en la televisión”, que por entonces anunciaba cuatro o cinco puntos por arriba de la lista kirchnerista. El ex jefe de Gabinete de Néstor Kirchner y “asesor de campaña” de Massa, Alberto Fernández, se extendió en su exposición ante la prensa. “Estamos empezando a escribir otra historia”, imaginó, porque “Sergio se ha animado a sembrar una semilla”.

Cerca de las 20, el intendente de Almirante Brown, Darío Giusto-zzi, fue el último en desfilar ante la prensa ya con cifras más firmes (fue el primero en confirmar victorias amplias en su localía, en Avellaneda, Lanús y algunos partidos del Oeste). “Es la victoria de un estilo. Cuando nos presentamos, hace 40 días, sabíamos que íbamos a ser competidores, pero no tanto. Dimos respuestas y la gente entendió”, mencionó. Pasadas las 21, Massa revoleaba los dedos en V desde la entrada al VIP de su refugio político, abrazado a su mujer, Malena Galmarini, de igual gesto, y a sus dos hijos.

“Hemos dado el primer paso en la construcción de un nuevo frente político. Es una semilla que germina con destino a octubre y la mirada puesta en el futuro de la provincia y de la Argentina”, arrancó el jefe comunal de Tigre, de jean y campera informal. “Se siente, se siente, Massa presidente”, le devolvió el híbrido público cuarentón que lo esperó con calma y estalló el instante previo a que el primer candidato del Frente Renovador pisara el escenario, arengado por dos hombres cual productores de televisión. El intendente agradeció a quienes eligieron ese espacio político, por “posicionarlo y con una diferencia bastante grande como la fuerza más votada” y a los que “no nos votaron esta vez”, a quienes les prometió “trabajar para construir más confianza”.

Massa les habló a “los jubilados, a los comerciantes, a los trabajadores, a esa enorme potencia de la clase media en la Argentina que tiene que tener representación” y los posicionó como los destinatarios de su construcción política. “No-sotros debemos asumirla”, sentenció, luego de reiterar sus “propuestas”: “Esta elección demuestra que estamos en tiempo de proponer más lucha contra el desempleo, la inseguridad, la inflación y los impuestos que ahogan a la gente; de luchar por la independencia de la Justicia y del resto de los poderes, por la defensa de la Constitución Nacional”, continuó y remarcó la imagen con la que instaló su espacio: la de la no confrontación. “Dimos una elección ejemplar, demostramos que una propuesta sin agravios puede realmente sumar el respaldo de la sociedad”. Tampoco se olvidó de “la diversidad”, la principal característica de las listas del Frente Renovador. “Hemos conseguido, como dijo nuestro Papa, la unidad en la diversidad, la concordia”, defendió.

Poco más de una hora después, Massa interrumpió a Damas Gratis para insistir con los conceptos de su presentación inicial. En conferencia de prensa, en tanto, evitó hablar de la victoria del PRO en la ciudad de Buenos Aires y esquivó conjeturas sobre minorías y mayorías legislativas post-octubre. Se diferenció del destino que tuvo el diputado Francisco de Narváez luego de su victoria en 2009: “La gran diferencia es que contamos con el apoyo de más de 20 intendentes que eligieron tomar otro rumbo”, distinto al kirchnerismo. Muchos de ellos, como Jorge Macri, de Vicente López; Joaquín de la Torre, de San Miguel; y el propio Giustozzi integraron los festejos íntimos junto con varias figuras de la política como Graciela Camaño, Eduardo Amadeo y Miguel Angel Toma.

“Tenemos la humildad de entender que esto no es un cheque en blanco y de seguir trabajando para seducir a la porción del electorado que no nos votó”, insistió Massa antes de retirarse. Los micrófonos se apagaron y volvió Damas Gratis.