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Funcionarios nacionales y empresarios del sector turístico se reunieron ayer para analizar la evolución de la temporada de verano. “Tenemos 27,9 millones de argentinos que han elegido el turismo doméstico y que tienen un altísimo impacto. Lo mismo que más del 1300 por ciento de incremento en la tasa de alojamiento en la última década”, resaltó el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Esto, dijo, representa un “59 por ciento de incremento en el número de argentinos que prefieren el turismo doméstico”.

El jefe de ministros participó del encuentro junto al titular de la cartera de Turismo, Enrique Meyer; el presidente del Consejo Federal de Turismo, Javier Espina, y los principales dirigentes del sector a nivel nacional, agrupados en la Cámara Argentina del Turismo, presidida por Oscar Ghezzi.

Capitanich destacó además una segunda serie de indicadores relacionados con el flujo de veraneantes y su incidencia sobre las economías regionales: se trata de “un sector que moviliza 1.100.000 trabajadores”, explicó.

El ministro Meyer reafirmó “la importancia del posicionamiento de la actividad turística como una política de Estado y del trabajo en conjunto tanto con el sector público como privado para lograr mayor competitividad y crecimiento en los índices turísticos”.

Los empresarios y referentes turísticos expusieron propuestas e inquietudes para mejorar la competitividad del sector con el propósito de promover el turismo interno, así como el internacional.

Sobre el final de la reunión se acordó preparar una serie de objetivos, con el propósito de firmar –en un próximo encuentro en febrero– un plan de trabajo y un cronograma a desarrollar durante este año.