Martes, 3 de junio de 2014 | Hoy
EL PAíS › LAS POSTURAS ANTE EL PROYECTO DE POLICíAS COMUNALES
Por Laura Vales
“Durante dos años y medio, Sergio Massa elogió mi proyecto de policías comunales”, recordó Marcelo Saín, diputado de Nuevo Encuentro e impulsor de los cambios que la Legislatura bonaerense hizo al proyecto de ley enviado por el gobernador Daniel Scioli, modificaciones cuestionadas por el Frente Renovador. Saín advirtió que Massa “no quiere la Ley de Policías Locales porque no le da el protagonismo que él esperaba como autor”. “El Frente Renovador ha perdido protagonismo sobre la iniciativa en el tema: para Massa lo que cuenta es esto. Y a esa iniciativa la perdieron porque el gobernador decidió acordar con sectores de la oposición, entre ellos nosotros (por Nuevo Encuentro) un nuevo proyecto, un proyecto que está bien estructurado en el acuerdo de seguridad democrática.”
–Un tema es el rol que tendrán los intendentes. Nosotros en el proyecto de ley fuimos muy específicos: el intendente no sólo va a ser el jefe administrativo operacional de la policía local, sino que también se le va a transmitir su mando operacional, y el de las unidades de la Policía Bonaerense que queden en su municipio para hacer seguridad preventiva. Esto se hará para que haya una sola conducción y para evitar la competencia por el control territorial. Agregaría además: se hace con el fin de evitar que la Bonaerense siga manejando la calle para regular los negocios criminales a los que se ha dedicado todo este tiempo.
–Ellos quieren una policía bien tradicional en cuanto a restituir lo que hemos excluido del proyecto, que es el estado policial permanente. Esto es: defienden que los derechos, las obligaciones y las prohibiciones del personal policial deben durar las 24 horas los siete días de la semana. Acorde con esto, creen que la policía debe portar armas todo el tiempo. En el proyecto de ley, en cambio, acordamos que esto no fuese así: por primera vez habría una policía sin estado policial permanente, donde las obligaciones funcionales de los policías sólo tendrán vigencia durante el desarrollo de su trabajo. En situación de franco servicio no tendrán obligaciones funcionales y tendrán prohibido taxativamente intervenir frente a un hecho criminal: sólo podrán dar a conocer o informar a la policía sobre esto. Acorde con esto, prohibimos que porten las armas provistas por el Estado fuera de su horario de trabajo.
–Primero, que se conviertan en trabajadores plenos de derechos, como cualquier otro trabajador. Es muy ingrato que el Estado los obligue a intervenir 24 horas al día, fuera de su horario de trabajo, pagándoles salarios miserables que los empujan al doble empleo. Pero, además, en la mayoría de los casos en los que deben intervenir terminan previniendo robos a través de un homicidio. Esa es una aberración absoluta, aunque la ven como tal sólo los ojos de ciertos sectores políticos que tienen una mirada más experta en el tema, porque la verdad es que por izquierda y por derecha están planteando otra cosa. La posición del Frente Renovador contraria a este precepto la comparte (el secretario de Seguridad) Sergio Berni, el ministro (Alejandro) Granados y la policía de la provincia de Buenos Aires. Ahora, en la Cámara de Diputados hubo un consenso importante en esta materia. Agrego más: la mitad del Frente Renovador cree que las cosas deben ser como las hemos establecido en la ley. Lo que pasa es que el sector político interno del Frente Renovador que termina marcando la posición es el conducido por Darío Giustozzi, que es un conservador que se ha puesto la gorra, y una de las expresiones más acabadas de la mano dura en la Argentina.
–No es así. Es una policía que tiene plenas facultades de intervención frente a cualquier hecho delictivo. Si quieren ver a la policía que yo he conformado en la Argentina, pueden fijarse en la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que tiene los mismos parámetros profesionales e institucionales que hemos volcado al proyecto de las policías locales. Es la que detuvo a Hugo Tognoli y toda la banda de narcopolicías santafesinos.
Jorge D’Onofrio, presidente del bloque de senadores massistas en la Legislatura bonaerense, es uno de legisladores que participó en las conversaciones con el ministro de Seguridad, Alejandro Granados, para acordar el proyecto de ley de policías locales que la gobernación envió a la Legislatura.
–Son 31 observaciones. Las de fondo tienen que ver con el estado policial y las capacidades y atribuciones de las policías y el tema del presupuesto.
–El ministro Granados trajo un proyecto que había sido consensuado con los intendentes y legisladores del Frente Renovador. Ese proyecto después fue modificado; el autor de las modificaciones fue Marcelo Saín. La mayoría de esos cambios tienden a cercenar atribuciones de la policía, dejándola prácticamente inactiva. Además, el proyecto crea un consejo de conducción que vendría a ser lo mismo que si nosotros pusiéramos entre Daniel Scioli y el ministro de Seguridad un cuerpo consultivo donde siempre fuera minoría el gobernador.
–La ley dice que las partidas tienen que girarse automáticamente y mensualmente. Hasta ahí parecería que está todo muy bien. Ahora, el sistema es que recauda el Banco Provincia, va a rentas generales, el ministerio libra los pagos y Tesorería paga en la medida en la que tiene disposición y ganas. De hecho, hoy la policía comunal tiene seis meses de atraso y los bomberos, dos años. Nosotros planteamos que sea como la coparticipación: que a medida que el Banco Provincia va recaudando, lo gire directamente, sin pasar por Rentas generales.
–Aprobar en general y modificar en particular.
–No sé, ahí no hacemos política ficción. Una vez que estemos sentados en las bancas veremos la conciencia de cada uno y qué es lo que se votó. Si me fuera a guiar por lo que dicen el ministro Granados y (el secretario de Seguridad nacional, Sergio) Berni, me da la impresión de que va a haber modificaciones al proyecto.
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