Los restos de Antonio Cafiero, fallecido el lunes a los 92 años tras sufrir una neumonía, fueron sepultados ayer en la bóveda que tiene su familia en el cementerio del partido bonaerense de San Isidro, luego de haber sido despedidos en el Salón Azul del Congreso. Del sepelio participaron dirigentes de todos los sectores políticos, que destacaron el compromiso del ex gobernador bonaerense con la democracia argentina. Tras su fallecimiento, el gobierno nacional emitió un “cálido, afectuoso y reconocido homenaje” en su memoria y oficializó ayer en el Boletín Oficial el duelo nacional por dos días en su memoria.

El féretro con el cuerpo del dirigente había sido trasladado a San Isidro, donde vivió gran parte de su vida, poco antes de la medianoche del lunes, luego de la despedida en el Congreso. Por voluntad de los familiares, el respeto y cariño de quienes lo conocieron se plasmó en donaciones al Hospital Materno Infantil Ana Goitia, en Avellaneda, bautizado con ese nombre en homenaje a quien fuera su mujer.

“Todos nos sentimos un poco hermanos de Antonio”, dijo el histórico referente peronista Lorenzo Pepe, que dio un breve discurso junto al féretro. Junto a él estaba la numerosa familia de Cafiero, que tuvo diez hijos, treinta y nueve nietos y veintitrés bisnietos. “El próximo candidato con apellido Cafiero que se presente a elecciones va a ganar con los votos de su familia”, bromeó el titular del Instituto Juan Perón al respecto. “Más que llorarlo hay que imitarlo”, agregó Pepe, que destacó que el histórico dirigente “fue un gran peronista porque se rodeó y fue rodeado por personas que no tenían su mismo pensamiento”.

Entre los asistentes estaban el gobernador salteño Juan Manuel Urtubey, el diputado por el Frente para la Victoria Carlos Kunkel, el embajador argentino en Chile, Ginés González García; el ex presidente interino Eduardo Duhalde, el candidato presidencial del socialismo Hermes Binner, el diputado radical Ricardo Alfonsín, el intendente de San Isidro Gustavo Posse, los diputados del Frente Renovador José Ignacio de Mendiguren y Felipe Solá, el ex diputado del PRO Eduardo Amadeo y el ex diputado radical Leopoldo Moreau y el ex ministro de Economía Roberto Lavagna, entre otros. A pesar de la concurrencia variada, durante la ceremonia se entonó, respetuosamente, la marcha peronista.

“Fue un grande que luchó por la democracia argentina con las banderas del peronismo”, lo definió Kunkel, en diálogo con la prensa, al retirarse del lugar. “Junto al ex presidente Raúl Alfonsín, fue el hombre que consolidó la democracia en la Argentina”, agregó el legislador, que destacó que “la militancia y el ejemplo de Antonio Cafiero permitieron ir sintetizando al peronismo”, más allá de las diferencias internas y mantener al justicialismo unido “en las luchas más arduas”.

Por su parte, Moreau recordó que “Cafiero fue el dirigente de la oposición que despidió los restos de Raúl Alfonsín y, en ese momento, dijo que tenía que darnos una mala noticia a los radicales porque, a partir de allí, Alfonsín no pertenecería más a los radicales sino a todos los argentinos” y que, desde ayer, “Cafiero deja de pertenecerles a los peronistas, para pertenecerle a todo el pueblo argentino”.

Ayer por la mañana, el gobierno nacional había emitido un “cálido, afectuoso y reconocido homenaje” por la muerte del dirigente, además de recordar también al ministro de la Corte Suprema de Justicia Enrique Petracchi y a la sindicalista docente Stella Maldonado, que fallecieron en las últimas horas. El encargado de dar el mensaje fue el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien destacó que Cafiero fue “un líder político indiscutible”, con “una trayectoria dilatada como funcionario” bajo diferentes gobiernos peronistas (ver aparte).

Además, ayer se oficializó el duelo nacional de dos días en su homenaje, por haber “ofrecido su vida al servicio de la República”. El decreto 1835, que así lo estableció, fue publicado en el Boletín Oficial con las firmas de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y del ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo. En los considerandos, se recordó el extenso paso de Cafiero por la función pública y se indicó que “consagró su vida a la actividad política y a la democracia, siendo fiel a sus ideas hasta el presente”.

Cafiero falleció el lunes en un sanatorio de San Isidro, tras haber sido internado el 29 de septiembre a causa de una neumonía. Presente en el peronismo desde el 17 de octubre de 1945, fue el ministro más joven que tuvo Juan Domingo Perón, cuando asumió como titular del Ministerio de Comercio Exterior a los 32 años (antes había ocupado cargos diplomáticos).