El cruce de la autopista Riccheri y el río Matanza, donde el 17 de noviembre de 1972 las masas peronistas se enfrentaron al Ejército para llegar hasta Ezeiza a recibir a su líder que regresaba del exilio luego de dieciocho años, será esta tarde el lugar del acto que, según se anticipa, será el más grande del Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires durante este año. El doble anfitrión, Fernando Espinoza, intendente de La Matanza y presidente partidario, invitó para la ocasión a todos los precandidatos presidenciales del Frente para la Victoria, que hace rato que no coinciden en el mismo lugar. Anticipando el encuentro, dialogó con Página/12 sobre las chances del oficialismo en los comicios del año próximo y su propia candidatura a gobernador.

–Hace un año, el peronismo bonaerense parecía al borde de una ruptura, tras la derrota electoral. ¿Cuál es el estado de situación actual?

–Yo lo veo más fuerte que nunca. Creo que tenemos hoy una realidad muy distinta a la que había hace un año. Hoy veo un peronismo unido, sólidamente unido, donde a través del trabajo, de sacar el partido a la calle, de recorrer cada ciudad y pueblo de la provincia, a través del diálogo, a través de consensos, logramos generar que todos los sectores del peronismo hoy estén trabajando juntos en apoyo incondicional a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y a este modelo de país.

–En las últimas semanas hubo algunos roces entre los precandidatos a la presidencia. ¿Tiene fortaleza el peronismo para soportar una campaña áspera y llegar unido a las elecciones?

–El peronismo es la columna vertebral del Frente para la Victoria, la fuerza política más grande de la Argentina sin lugar a dudas, con la responsabilidad de gobernar la mayoría de las provincias, con más de dos mil intendentes en todo el país. Nuestra prioridad es seguir gobernando, no la campaña, porque es la responsabilidad que nos dieron nuestros ciudadanos. Después, hablando de opciones electorales, es claramente una cantera de dirigentes que pueden ser muy buenos presidentes o muy buenos gobernadores. Es el único proyecto que puede ofrecer un abanico de precandidatos que puede conducir muy bien la Argentina que viene. Pero cualquiera sea el presidente, la conductora natural de este movimiento es nuestra presidenta Cristina y va a seguir siéndolo. Ella garantiza la unidad.

–¿Usted será candidato a gobernador?

–Soy un enamorado de las construcciones colectivas. Nosotros somos una construcción colectiva que nace desde la misma base de la sociedad, eso es el peronismo. En la provincia de Buenos Aires tenemos un semillero de jóvenes legisladores e intendentes y hay tres o cuatro precandidatos a gobernador que van a ser, cualquiera de ellos, buenos gobernadores, porque somos parte de esta construcción política. Están mi compañero y colega Patricio Mussi, mi amigo Diego Bossio, el vicegobernador Gabriel Mariotto, y estamos nosotros, que desde La Matanza ya vamos por un segundo mandato y creemos que a través de la unidad de todos los sectores del movimiento vamos a lograr el apoyo de las mayorías populares, de la clase media, de la pequeña burguesía, de los pequeños productores, y entre todos vamos a hacer más grande la provincia de Buenos Aires. De la misma forma que esta provincia es la más grande del país y funciona como un país dentro de otro, este municipio es el más grande de la provincia y funciona como una provincia en sí misma. Así como pudimos cambiar La Matanza, ahora queremos transformar Buenos Aires.