El gobernador bonaerense y precandidato presidencial, Daniel Scioli, dijo que aceptaba las disculpas que le envió el ministro del Interior y Transporte y adversario interno, Florencio Randazzo, en caso de que se hubiera sentido ofendido por su expresión “proyecto manco”, aunque el funcionario aclaró que no había sido su intención burlarse. “No quiero retroalimentar algo que ha sido una situación desagradable”, dijo ayer Scioli, aunque consideró que su “cara a cara” electoral no era con Randazzo sino con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.

El origen del malentendido fue la presentación de Randazzo del sábado pasado ante los intelectuales de Carta Abierta, en la Biblioteca Nacional. En un momento, el ministro contó que había decidido presentarse como candidato a presidente cuando entendió que el proyecto podía quedar “manco”. Varios de los que lo escuchaban se rieron y, pese a que él aclaró que no lo había dicho adrede, algunos medios le dieron difusión a la frase. Incluso, la esposa de Scioli, Karina Rabolini, lloró durante una entrevista televisiva cuando la pusieron en conocimiento de la frase. Randazzo luego insistió con que no lo había dicho a propósito y pidió disculpas en caso de que alguien se hubiera sentido ofendido.

“Sería contradictorio en mí no dar por superado, no aceptar las disculpas del caso”, señaló ayer el gobernador bonaerense. Reiteró que lo consideraba un hecho desagradable, “fundamentalmente por el mensaje que se transmite, en un ámbito donde imagino que no era el espíritu de llevarlo a la lectura que tuvo”. “Vivo la vida sin rencor, mirando para adelante y dando por superadas las cosas. Es lo que la Argentina necesita hoy más que nunca, debates en términos positivos, constructivos, en la complementación, y para generar confianza en la sociedad. Coherentemente con lo que he sido en mi vida siempre busco descomprimir las situaciones que pueden generar conflicto. Acepto las disculpas y punto”, concluyó.

Scioli se preocupó en dejar en claro que no consideraba que su competencia fuera contra Randazzo. La estratagia del gobernador bonaerense –favorito en las encuestas– es ya dar por hecho que será el candidato del Frente para la Victoria. “Mi cara a cara es con Macri, ahí se confrontan dos visiones de país”, subrayó. De inmediato aclaró que “las PASO es donde se resuelven democráticamente todas las candidaturas” y que su frase no era para “subestimar a nadie”. “No borro a nadie, digo dónde estoy poniendo el esfuerzo. Después, democráticamente, la gente ordenará las candidaturas de los distintos espacios políticos. Y yo siempre me he sometido en cada elección al voto popular”, concluyó.

Por otro lado, ayer Scioli firmó un convenio de educación secundaria a distancia para empleados municipales con el rector de la Universidad de Buenos Aires, Alberto Barbieri. “La mejor distribución del ingreso tiene que venir de la mano de la mejor distribución del conocimiento”, sostuvo Scioli durante la firma del convenio, realizado en el rectorado de la UBA, en Viamonte al 400. “Creemos profundamente en la integración de la universidad con el sector público y el sector productivo, la UBA está a la vanguardia” en lo que se refiere a “la vinculación de la educación con el mundo del trabajo, para lograr más y mejores empleos”, añadió Scioli. Dos de las orientaciones de estudio previstas en el programa serán Acción Social y Salud. “Que son temas centrales en nuestra agenda de trabajo”, aseguró el gobernador.