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“Recién empieza el gobierno de Felipe Solá, y a Kirchner y a la gente no les gusta mucho que, cuando apenas empieza un gobierno, ya se busquen candidatos. Es prematuro.” Con esas palabras, el ex presidente Eduardo Duhalde cuestionó ayer a Aníbal Fernández, quien desde noviembre pasado viene manifestando su intención de lanzarse como candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires.
Fernández nunca ocultó sus intenciones. Pero en el último fin de semana, se conoció su voluntad de suceder a Solá. Ayer, a pesar de la queja de Duhalde, quien desde la India consideró que el funcionario “se adelanta mucho” con su promocionada candidatura, el ministro del Interior se mantuvo firme, aunque evitando la confrontación con el jefe del distrito. “El doctor Duhalde nunca diría esto con objetivos de poner paños fríos”, aseveró Fernández. Y agregó: “Por el contrario, él debe estar imaginando un mejor escenario para discutir este tipo de cosas, más adelante. El hombre común de la provincia de Buenos Aires –enfatizó– necesita saber quién lo va a gobernar y yo estoy diciendo, a tiempo vista, que voy a tratar de competir ordenadamente”.
La intención del funcionario nacional ya removió el avispero en la provincia. El gobernador Solá, por ejemplo, se quejó del modo en que se reparten los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) en el distrito. “Yo no me quejo de que Fernández esté caminando la provincia, porque no interfiere en mi gobierno. Pero sí quiero que el reparto de ATN esté vinculado con las prioridades que establezca el gobierno provincial y no que se prodiguen a los intendentes amigos, como se está haciendo”, reconoció el mandatario a la revista Noticias.
Por su parte, el intendente de Berazategui, el duhaldista Juan José Mussi, dijo que sabía desde hace tiempo de las intenciones de Fernández de buscar convertirse en el sucesor de Solá. “Yo conocía esa vocación, porque fui viceministro de Aníbal durante seis meses y no veo quién se va a oponer a esa posibilidad. Aníbal es un dirigente joven, capaz, emprendedor y, en última instancia, quien va a decir que sí o que no va a ser el afiliado justicialista que dirá quién tiene que ser su candidato, señaló Mussí al programa Graves y Agudos, de Radio Cooperativa.
En tanto, el diputado nacional José María Díaz Bancalari, un eterno aspirante a la gobernación, dijo que si fuera por él también hablaría de su candidatura. Pero consideró que “toda candidatura a cargos que se definan en 2005 o 2007 es apresurada”. “En ninguna agenda de la sociedad –reflexionó– están anotadas las candidaturas para 2005 y mucho menos para 2007. Además, los funcionarios hoy están preocupados y ocupados en resolver los problemas de la sociedad.”