EL PAíS
La designación de Bonasso divide a los diputados del duhaldismo
Varios diputados bonaerenses objetaron que Bonasso presida la Comisión de Relaciones Exteriores. Pero Eduardo Camaño y la propia Chiche avalaron esa propuesta, que viene de Presidencia.
Por Felipe Yapur
Una vez que finalizó la sesión donde se aprobó la nueva ley laboral, los diputados del PJ bonaerense se encaminaron en silencio hasta el despacho del presidente del cuerpo, Eduardo Camaño. La intención era conversar sobre cuestiones atinentes al grupo que responde a Eduardo Duhalde. Sin embargo, derivó en una fuerte queja por la designación del kirchnerista no justicialista Miguel Bonasso en la Comisión de Relaciones Exteriores. Si bien un grupo de duhaldistas se animó a exigirle al jefe del bloque, José María Díaz Bancalari, una reunión con el presidente Néstor Kirchner para hacerle llegar la queja, todo indica que sólo será un pataleo interno ya que ni siquiera consiguieron el respaldo de Hilda “Chiche” Duhalde.
El organizador de la reunión fue Díaz Bancalari, quien dijo a los presentes que consideraba que era preciso que el grupo mantuviera encuentros periódicos, tal como hacen los kirchneristas. “Hay que contener a los nuestros como hacen ellos”, dijo el jefe de la bancada. Alfredo Atanasof consideró que era una equivocación: “Nuestro grupo no es cualquiera, somos cuarenta, y además si nos reunimos no va a faltar quien crea que estamos conspirando”, dijo el ex jefe de Gabinete de Duhalde.
La frase de Atanasof pareció quitarle sentido a la reunión, sobre todo cuando recordó que el duhaldismo tiene a su cargo no sólo la conducción de la Cámara sino también del bloque. Pero los legisladores querían hablar. Fue allí que Oscar Rodríguez, el ex número dos de la SIDE en tiempos de Miguel Angel Toma y Carlos Soria, junto a Oscar Dilandro y Alberto Coto tiraron en la mesa el tema Bonasso. Según relató a este diario uno de los participantes del encuentro, los legisladores plantearon la necesidad de recuperar la comisión para el PJ. Camaño no los dejó terminar.
“Les voy a recordar cómo comenzó esta historia –memoró–. A principios de enero, Duhalde me pidió que conformara la comisión bicameral del Mercosur. Para ello me pidió que nombrara a Atanasof. Antes de hacerlo consulté con el presidente Kirchner, quien me dio el okey. Eso sí, me dijo que Carlos Ruckauf no podía estar en Relaciones Exteriores y que ese puesto lo iba a decidir él.” Camaño aclaró que el Presidente no descalificó al ex canciller y acalló algunos comentarios cuando agregó que “si un ex presidente pide por una comisión, nada le podemos decir al Presidente. Es más que razonable”. En ese momento, Hilda “Chiche” Duhalde se sumó a la conversación y apoyó la posición de Camaño.
De todas formas, los díscolos no se contentaron y prácticamente le exigieron a Bancalari una reunión con el Presidente para expresarle su descontento por el caso Bonasso y por la nula comunicación que tienen con el titular del Ejecutivo, contrariando tradiciones previas. Igual, Bancalari se comprometió a gestionar la reunión, sin mucho entusiasmo.
“Es un simple pataleo”, sintetizó uno de los protagonistas del encuentro aunque aclaró que “es lógico”. Según el legislador, a ningún integrante de la bancada del PJ –son 130– les cayó en gracia el nombre de Bonasso para Relaciones Exteriores. Esto fue el caldo de cultivo perfecto para que tanto menemistas como el propio Ruckauf operaran sobre las cabezas de los duhaldistas despechados. Incluso, relató el legislador, el propio Adolfo Rodríguez Saá aportó lo suyo: “Ustedes le entregaron la nómina del bloque y el Presidente eligió a uno de otro bloque”, habría susurrado, socarrón, el puntano.
“Habrá que ver quién se atreve a cuestionarle a Kirchner la decisión de nombrar a Bonasso”, indicó uno de los diputados del PJ que si bien reconoció que no le gusta la idea de que el periodista presida la comisión, reconoció que no hay espacio para la queja.
Así las cosas, todo indica que sólo el Presidente puede desbancar a Bonasso de una de las comisiones clave del Congreso.