EL PAíS
En San Luis, se multiplican las marchas y sigue el paro docente
La asamblea de maestros puntanos ratificó el paro por tiempo indeterminado y la Multisectorial espera una multitud en la marcha de mañana. Piden la intervención para destituir a Alberto Rodríguez Saá.
Por Eduardo Tagliaferro
En San Luis la protesta contra los Rodríguez Saá continúa. Lejos de aplacar los ánimos, la rueda de prensa del ministro del Interior, Aníbal Fernández, junto al gobernador Alberto Rodríguez Saá, irritó a muchos puntanos. El pedido del ministro a los docentes de la provincia para que abandonaran sus marchas e iniciar una negociación sumado a la advertencia del responsable local de Educación de descontar los días de paro, impulsó a varios maestros a salir a la calle. El intenso frío no fue un obstáculo para que permanecieran durante todo el día en la plaza pública. En asamblea ratificaron el paro por tiempo indeterminado. Los docentes privados también se sumaron a la movida y acompañarán con un paro hasta mañana. Día para el que la Multisectorial convocó a una nueva manifestación.
En el mismo momento en el que Aníbal Fernández enfrentaba las cámaras televisivas junto al gobernador puntano, en San Luis, el responsable educativo, Luis Marrero, hablaba en la tevé local. Lejos de ser disuasivo, confirmaba que “se les descontarán los días caídos a todos los docentes que se plieguen al paro”.
A primera hora de la mañana unos dos mil docentes se acercaron a la Carpa de la Dignidad, frente a la sede de gobierno. A las diez comenzaron a rodear el palacio gubernamental. Un poco por el frío, otro por el enojo, lo cierto es que emprendieron una marcha de una plaza a la otra. De a poco se fueron sumando algunos vecinos. A esa altura, el PJ local había desistido de su convocatoria a respaldar en la calle al gobernador. “Suspendemos la marcha ante el compromiso dado al ministro del Interior y atento a los hechos de violencia que han perturbado la paz social e intentan desestabilizar a las instituciones democráticas de la provincia”, dijo un comunicado del peronismo puntano, que preside Ana María Torrontegui, una de los dos intendentes que tiene la capital sanluiseña. El peronismo local también reivindicó la independencia federal.
A última hora de anoche, los docentes esperaban el arribo de los referentes gremiales que se trasladaron a Buenos Aires para participar de la entrevista con el ministro del Interior. El sindicato puntano ya había votado a hora temprana la continuidad de las medidas de fuerza, pero esperaba a sus delegados para una evaluación. A esa altura ya se conocía que la Ctera había llamado para el viernes a una jornada nacional de protesta en solidaridad con los maestros puntanos. “En San Luis como en todo el país, estamos en solidaridad con la lucha por la defensa de la escuela pública y la dignidad docente”, sostuvo el titular gremial, Hugo Yasky.
Por otra parte, una de las versiones más recurrentes durante la jornada fue la existencia de un acuartelamiento policial, algo que desde el Ejecutivo provincial niegan con énfasis. En un anfiteatro de la sede policial deliberaron durante gran parte de la mañana muchos de los mil doscientos uniformados que tiene la fuerza junto a algunos jefes. A pocos metros de allí, el viceministro de la Legalidad, Eduardo Allende, estaba reunido con los altos mandos de la cúpula policial.
“¿Les respondieron el petitorio que presentaron? ¿Están realizando alguna medida de fuerza?”, alcanzaron a preguntar algunos periodistas cuando se abrió una de las puertas del anfiteatro donde se encontraban reunidos los miembros de la policía local. “Ningún comentario”, fue la única respuesta que entregó uno de los efectivos.
“No hay rechazos a las propuestas de la fuerza policial. Para nada”, respondió Allende cuando le preguntaron por las negociaciones que el gobierno provincial viene manteniendo con los uniformados. Entre las medidas que reclaman los policías se encuentra el respeto de su rango y de la antigüedad. Sucede que a partir de la iniciativa de “refundar las leyes” de la provincia, entre las que pierden vigencia, si no son confirmadas, se encuentra el estatuto policial. “Hemos discutido como hacer la transición para que ésta no sea traumática. Se avanzó y se cumplió con la palabra del gobernador”, concluyó Allende al analizar las reuniones que mantuvo con los uniformados.
Otro de los hechos destacados estuvieron en boca del jefe de policía de San Luis, Víctor Malavassi. Luego de admitir que se está investigando, lo que calificó como “probables excesos policiales”, de la represión del fin de semana, entre ellos el disparo de gases lacrimógenos dentro de las unidades móviles de Crónica TV, el titular de la policía manifestó la preocupación por su familia. Lo hizo en un tono que a los docentes les sonó a amenaza. “Si algo le pasa a mi familia hago responsable a los maestros. Soy puntano, tengo hijos”, dijo Malavassi en diálogo con la FM Dimensión. “Si usted no puede velar por la seguridad de su familia qué nos queda al resto de los puntanos”, fue el comentario del periodista. Para muestra vale un botón.