EL PAíS
Elisa Carrió faltará a una cita con el ministro de Planificación
Es la audiencia de conciliación en la causa que inició De Vido porque la líder del ARI le dijo “cajero del Gobierno”.Carrió no va a ir. El ministro pidió 50 mil pesos de indemnización.
Por José Natanson
Primero presentó una denuncia. Después, enfurecido, reclamó prisión para la acusada. Más tarde, por instrucciones de Néstor Kirchner, retiró el pedido, aunque mantuvo la querella. Hoy, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, deberá presentarse a una audiencia de conciliación con la líder del ARI, Elisa Carrió. Allí deberá aclarar si está dispuesto a mantener la denuncia y seguir adelante con el juicio o si prefiere desactivar la querella y olvidarse del asunto.
El entuerto comenzó cuando Carrió sostuvo que el funcionario fue el “recaudador de la campaña” presidencial, lo calificó de “cajero del Gobierno” y agregó que es el responsable de “las relaciones con las empresas pesqueras más importantes”.
Como respuesta, De Vido presentó una querella por calumnias e injurias contra la ex diputada y exigió que publique solicitadas en los diarios pidiéndole disculpas. El 5 de marzo pasado sumó un elemento novedoso, que provocó una pequeña conmoción política: pidió que las penas se sumen, de modo que la líder del ARI termine presa en caso de que se la condene. “Me estoy probando el camisón a rayas”, bromeó Carrió.
Quince días después, acorralado por las críticas que generó el pedido de detención, De Vido dio marcha atrás. Difundió una carta en la que explicó que el Presidente le había pedido que bajara el tono de la denuncia para que no se interpretara como “un intento de silenciar a la oposición”. La carta era ambigua, y en un principio pareció que el funcionario había decidido retirar la querella penal y continuar con el pedido de indemnización civil. Ante la confusión, De Vido aclaró que no desactivó la denuncia penal sino el pedido de detención.
En este marco confuso, el juez a cargo de la causa, Rodolfo Canicoba Corral, fijó para hoy a las 12 la audiencia de conciliación entre las dos partes. “Lilita no va a ir. No está obligada, porque no fue la que presentó la denuncia. Y además no tiene nada que conciliar: ella ya dijo que no pensaba rectificar lo que había dicho y que mantenía sus palabras”, aseguraron cerca de la líder del ARI.
La iniciativa la tiene De Vido. Ayer, el funcionario viajó a Río Turbio, en Santa Cruz, donde trece mineros quedaron bajo tierra cuando se desplomó uno de los túneles de un yacimiento de carbón en el que estaban trabajando. Dos de ellos murieron y otros once estaban desaparecidos. Según explicaron anoche en el ministerio, De Vido tenía previsto pasar la noche en el lugar, monitoreando las tareas de rescate.
Aunque hoy al mediodía debería presentarse en Comodoro Py, el ministro puede mandar a su abogado, Marcelo Buigo, a la audiencia con Canicoba Corral. Como la denuncia involucra un delito de acción privada, del querellante depende la decisión de impulsarla o no.
Si ratifica la denuncia, la causa continuará avanzando. Aunque el pedido de detención fue retirado, Carrió podría ser condenada con prisión en suspenso. Si se la declara culpable, podría llegar a pagar una indemnización de 50 mil pesos, el monto exigido por el funcionario para reparar los daños que le habrían causado las declaraciones de la diputada.
La otra posibilidad es que el abogado no se presente, o que se presente y decida desactivar la denuncia. En ese caso, la causa caería naturalmente luego de un par de meses, y la historia de acusaciones y denuncias entre De Vido y Carrió llegaría definitivamente a su fin.