EL PAíS › KIRCHNER Y SOLA PROFUNDIZAN LA ACCION CONJUNTA CONTRA EL DELITO
“Sin competencia antes ni después”
Tras el éxito del rescate de Nine, el Presidente recibió al gobernador y a su ministro de Seguridad. Hubo felicitaciones mutuas y acuerdo para profundizar el trabajo mancomunado entre ambas jurisdicciones. Solá confirmó la primicia de Página/12: en el conurbano se pondrá en marcha la Policía Distrital. En la Zona Norte arranca el 1º de noviembre.
Néstor Kirchner y Felipe Solá analizaron en la Casa Rosada los alcances de la reforma de la política de seguridad que se llevará adelante en la provincia de Buenos Aires y que Página/12 adelantó ayer en exclusiva. A la luz del exitoso rescate de Patricia Nine, el gobierno nacional y el bonaerense tienen decidido trabajar de manera coordinada “sin competencia ni antes ni después” de cada eventual episodio delictivo. Precisamente por eso, durante el encuentro de ayer también estuvieron presentes el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanian; el de Interior de la Nación, Aníbal Fernández, y el número dos de la SIDE, Francisco Larcher.
La foto del encuentro fue de por sí el mensaje, que tuvo dos destinatarios, según dijeron los propios protagonistas: los delincuentes y la sociedad. “Ambos sabrán que ahora el Estado encontró un mecanismo exitoso para enfrentar actos extorsivos”, expresaron.
Eso sí, tanto Solá como Kirchner renegaron de la posibilidad de convocar a una conferencia de prensa para no transmitir una sensación de exitismo. Saben que la liberación de Patricia Nine es apenas un hecho, y que si bien puede ser tomado como un leading case (caso testigo) –la palabra se mencionó en la Casa Rosada– sólo el tiempo será quien corrobore la funcionalidad del nuevo accionar de las fuerzas de seguridad.
Durante el encuentro, que duró aproximadamente una hora y cuarto, Kirchner le pidió a Solá que transmitiera las felicitaciones del Gobierno a los policías bonaerenses que actuaron en el rescate de Nine, quien después de 25 días de cautiverio fue liberada el último sábado. Fuentes de las provincia informaron que el gobernador Solá le agradeció luego al Presidente por el operativo realizado por la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE), a través de su trabajo de escuchas telefónicas.
Más allá del reparto de flores, hubo lugar para mencionar la reforma policial que Solá quiere poner en marcha en la provincia y que ayer puso en conocimiento en un cúmulo de intendentes (ver página 4).
“Hay que seguir construyendo esta coordinación y avanzando en la lucha contra el delito sin triunfalismo, sin exitismo sino paso a paso”, consideró Solá casi tomando palabras de Kirchner, en un intento de que el caso Nine se transforme en un momento de inflexión en la seguridad bonaerense.
El gobernador aún recuerda aquellas peleas casi de cartel, como las vedettes de la calle Corrientes, que protagonizaban hasta hace poco tiempo algunos funcionarios provinciales y nacionales cada vez que se resolvía un hecho delictivo. Ayer, en cambio, la reunión se desarrolló en un “clima distendido” y se acordó evitar filtraciones en la información reservada que manejan ambos poderes y las fuerzas de seguridad para “no terminar haciendo el juego a los delincuentes”.
Si bien después del encuentro Kirchner continuó con su actividad habitual y no realizó declaraciones, sí lo hizo al mediodía durante su visita a la localidad de San Lorenzo. “Estamos contentos por los pasos dados, pero no queremos ser exitistas. Hay mucho para hacer y en esto, cada paso es importante”, dijo.
Según el Presidente, “no hay intereses que me hagan retroceder ni sustos que me quieran dar”. Los periodistas que cubrieron el viaje creyeron leer allí una alusión al percance que sufrió en el Tango O1, pero Kirchner dejó en claro que no hablaba del avión sino en términos generales.
El ministro del Interior, Aníbal Fernández, quien acompañó al Presidente en su travesía por Santa Fe, se refirió prácticamente en los mismos términos. “Los más importante es que esta señora –por Nine– ya está en su casa” pero “todavía hay mucho para hacer”.