EL PAíS
Chile desairó a Servini
La Corte de Apelaciones de Chile le negó a la jueza federal María Romilda Servini de Cubría la posibilidad de interrogar a Augusto Pinochet en la causa en la que investiga los asesinatos del general Carlos Prats y de su esposa, cometidos en Buenos Aires en septiembre de 1974. El tribunal del país vecino argumentó que allí también hay un expediente penal abierto por los mismos hechos, en el que el dictador ya fue desaforado.
“Por unanimidad la Corte resolvió que la solicitud de desafuero es improcedente”, anunció el presidente del tribunal trasandino, Juan González, que inició el estudio del tema a fines de diciembre y ayer le dio resolución.
Servini de Cubría había pedido el desafuero de Pinochet para indagarlo y establecer su responsabilidad en el crimen de Prats y su mujer, Sofía Cuthbert, que murieron con la explosión de una bomba colocada bajo su auto. Este caso estuvo más de veinte años radicado en Argentina y fue Servini quien rastreó la conexión entre la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) chilena con organismos de seguridad argentinos para aniquilar al matrimonio, que vivía exiliado en Buenos Aires tras el golpe de estado en Chile, en 1973.
En los tribunales argentinos, en el año 2000, fue condenado a prisión perpetua el ex agente de la policía secreta pinochetista, Enrique Arancibia Clavel. Se lo acusó por el homicidio de la pareja y por integrar una asociación ilícita destinada a perseguir, torturar y matar a quienes fueran disidentes de la dictadura de Pinochet. El año pasado la Corte Suprema incluso ratificó la condena considerando que los crímenes en cuestión no prescribieron.
La Justicia chilena consideró los mismos delitos para el ex director de la DINA, Manuel Contreras, los brigadieres Pedro Espinoza, Raúl Iturriaga Neumman y Christophe Willike, el coronel José Zarala, la agente Mariana Callejas (ex pareja de Arancibia) y un civil, Jorge Iturriaga Neumman.
A principios de diciembre la Justicia chilena desaforó a Pinochet para que pudiera ser indagado en los procesos que lleva adelante el juez Alejandro Solís. Servini había interpretado aquella decisión como “un antecedente favorable” para ella, pero al parecer se equivocó. Ayer, cautelosa, prefirió decir que aún no había sido notificada. “Tengo que esperar la comunicación formal”, sostuvo. Todo indicaría que la decisión del tribunal de apelaciones quedará firme.
La Corte chilena le hizo ayer otra concesión a Pinochet, al confirmar su libertad provisional en el juicio en que se lo responsabiliza por nueve secuestros y un homicidio en el marco del Plan Cóndor. La sala cuarta respaldó finalmente la excarcelación bajo fianza que fue dispuesta por el juez Juan Guzmán. El dictador había sido procesado el 13 de diciembre pero recién comenzó a cumplir arresto domiciliario el 5 de enero en su residencia de Los Boldos, a 120 kilómetros de Santiago. La reclusión fue breve. De todos modos su defensa pidió la reducción del monto de la caución, que ronda los 3500 dólares, una actitud considerada por los querellantes como un gesto de “hipocresía”.