EL PAíS › COMIENZA EN PORTO ALEGRE LA
QUINTA EDICION DEL FORO SOCIAL MUNDIAL
Se derrumba su estrategia
El interrogante de este encuentro es el porvenir del foro, que sirvió como plataforma para Lula. Ultima vez en Porto Alegre.
Por Eduardo Tagliaferro
Aunque en algunos sectores su color se parece al de un león, a nadie en Porto Alegre se le hubiera ocurrido asociar el nombre del Rio Guaíba con el del rey de la selva. A las márgenes del Guaíba y por el impulso de 60 matrimonios que bajaron de los barcos nació en 1772 esta importante ciudad del sur de Brasil. El río como escenario de los cambios que sobrevivieron a la colonización y al posterior mestizaje es el lugar destacado junto al que funcionarán los talleres y debates de la quinta edición del Foro Social Mundial. El escenario nació en 2001 para discutir una propuesta al neoliberalismo dominante en el planeta, y sirvió de fabulosa plataforma para Luiz Inácio Lula da Silva en la campaña electoral que lo llevó a ser presidente. Mucha agua ha corrido bajo los pies de los miles y miles de militantes antiglobalizadores. Lejos de los debates con el Foro Económico de Davos, Suiza, es el futuro de esta herramienta uno de los principales interrogantes que intentará develar el Foro.
La apertura formal del encuentro se realizará luego de la habitual manifestación que inunda las calles de Porto Alegre. La caminata partirá desde el mítico Mercado Público y concluirá en el anfiteatro Puesta del Sol. No habrá declaraciones, ni comunicados. Serán los números artísticos los que marcarán el comienzo de los cinco días de discusiones. En el show habrá artistas de los cinco continentes. Las tres grandes atracciones para los latinoamericanos son Bersuit Vergarabat, Manu Chao y Gilberto Gil.
Luego de su experiencia en la India, el Foro promete para el 2006 no tener un encuentro centralizado. Serán varios los encuentros que se realizarán con sede en cada uno de los cinco continentes. El 2007, si el FSM continúa gozando de buena salud, volverá a reunir a los militantes antiglobalizadores en un encuentro centralizado. En esa ocasión la cita será en Sudáfrica. Los más optimistas vaticinan que en 2008 será nuevamente América latina su sede. Queda claro que esta edición será la despedida de Porto Alegre como ciudad anfitriona. Aunque en esta ocasión, con sus 120 participantes inscriptos, la capacidad hotelera y la infraestructura parecen marcar el límite de organización para esta ciudad, no faltan los analistas que ven en los reveses que tuvo el PT en 2002 y 2004 el principal motivo que aleja al FSM de territorio gaúcho.
Mañana se podrá ver y escuchar a Lula en el lanzamiento de una campaña global contra el hambre. El evento está previsto en el Gigantinho, estadio del Internazionale de Porto Alegre. Los preparativos no dejan dudas de que los participantes estarán separados por muchas vallas del ex tornero mecánico que participó de la fundación de la Central Unica de Trabajadores. Lula llegará a Porto Alegre en el Aerolula –el costoso avión presidencial– que luego lo llevará a Davos, donde hablará frente a los poderosos de las finanzas. La información oficial insiste en anunciar que junto a Lula estará el premier español José Luis Zapatero.
El premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel participará de un panel sobre “el derecho a la vida y a la paz”. Entre las personalidades europeas, repite su presencia la francesa Danielle Mitterrand y por primera vez se presenta el premio Nobel de Literatura José Saramago. Para el portugués, “la palabra no basta. Es preciso transformar todo el discurso en acción”. Ese es, según Saramago, el principal desafío del Foro. Aclara que esto no implica que el FSM se transforme en un partido político. Desde el comienzo del FSM en el 2001 este fue el interrogante que sus organizadores nunca quisieron abordar: cómo sintetizar experiencias tan disímiles. Lograron unificar todos estos reclamos bajo la amplia consigna de “Otro Mundo es posible”. Sin duda una utopía importante. La utopía, para Saramago, tendría que quitarse de los diccionarios. Así lo testimonió en una entrevista a la página oficial delFSM: “El propio término lo dice. La utopía es algo que no se sabe dónde está pero que se supone que existe”, dice el escritor, y propone suplantar la palabra utopía por otra existente: mañana. Su explicación es contundente: “es para mañana el trabajo que hacemos hoy”.
El historiador estadounidense Inmanuel Wallerstein es junto al belga Eric Toussaint y el paquistaní Tariq Alí uno de los intelectuales que seguramente tendrá mayor acompañamiento de los participantes del foro. El 30 se presentará el venezolano Hugo Chávez. Los alimentos que consumirán los 120 mil participantes provendrán de huertas y cooperativas que funcionan dentro de lo conocido como Economía Solidaria. Algunos setentistas se sentirían en su salsa al saber que la Coca-Cola y los McDonald’s serán suplantados por productos locales. Por cierto, esto no garantiza que los antiglobalizadores puedan definir una política efectiva para detener el avance imperial. Esa es otra historia, y un capítulo de ella se escribirá durante estos cinco días de debates y movilización.