EL PAíS › ACTO DE LA AGRUPACION HIJOS EN
CORDOBA PARA CONMEMORAR SU ANIVERSARIO
El silencio que se rompió hace diez años
Por Camilo Ratti
Con la lectura de un documento dirigido a la sociedad que los vio nacer, la agrupación H.I.J.O.S (Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio) festejó sus diez años de vida. Al igual que hace una década, cuando luego de un campamento realizado en Río Ceballos, en las sierras de Córdoba, se presentaron ante la sociedad con una carta en la cual planteaban sus objetivos y sus reclamos de Justicia, la organización reivindicó a sus padres como “integrantes de una generación que peleó por un país más justo y solidario”, denunció que todavía “quedan muchos genocidas libres, más de 500 chicos apropiados que no conocen su verdadera identidad” y advirtió que el modelo económico implantado por la dictadura “sigue vigente”.
Pasaron muchas cosas desde que un grupo de jóvenes, reunidos por la necesidad de llenar un vacío personal y generacional que había dejado el terrorismo de Estado ejecutado por la dictadura, decidieran conformar una organización que los contuviera, diera sentido a sus vidas y buscara la verdad que gran parte de la sociedad, y sobre todo la Justicia, se había negado a reconocer.
“Nos unió un relato común, una necesidad de romper el silencio sobre nuestra propia historia y la de nuestro país”, dice el documento leído ayer en la plaza San Martín. “Tratamos de entender a nuestros padres que eligieron combatir la injusticia, crecimos indagando la cultura política y reivindicando lo realizado por una generación que peleó y murió por un país con Justicia”, continúa la carta.
Aunque pasaron diez años y el contexto actual es positivo en materia de derechos humanos, los H.I.J.O.S., regional Córdoba no olvidaron que nacieron en pleno auge del menemismo, “cuando los genocidas eran amparados por la Justicia, (el ex marino Adolfo) Scilingo reconocía los vuelos de la muerte y la sociedad se negaba a reconocer la verdad”.
“H.I.J.O.S. es la continuación de la lucha de las Abuelas, las Madres y los Familiares. Todos ellos son los responsables de nuestro nacimiento, y desde el comienzo entendimos que éramos una expresión de esa larga lucha por la verdad y la Justicia encabezada por los organismos de derechos humanos”, dice el documento. En este sentido, agrega: “Nacimos exigiendo el verdadero final de nuestros padres, de nuestros hermanos apropiados. Y lo hicimos a través de los escraches porque la Justicia estaba bloqueada por la impunidad, por eso construimos la condena social”.
Pasaron diez años y las razones que fundaron H.I.J.O.S. siguen vigentes: “El aparato represivo está presente en los grupos policiales que torturan a nuestros niños en las cárceles de la miseria, todavía están libres la mayoría de los responsables y cómplices del terrorismo de Estado, hay casi 500 jóvenes que no conocen a sus padres y nuestro pueblo sigue sufriendo en carne propia las consecuencias de la dictadura en el plano económico”.
Sin olvidar que las causas por violaciones a los derechos humanos están avanzando en los distintos juzgados federales del país, que existan 150 genocidas procesados y que la Corte Suprema de Justicia está a punto de anular las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, la regional Córdoba de H.I.J.O.S. no quiere dejar pasar su décimo aniversario sin reafirmar “la vigencia de nuestras demandas y las reivindicaciones de nuestros padres, que murieron peleando por un mundo mejor”.