La escalada verbal entre Mauricio Macri y Aníbal Ibarra no se detiene. Ayer, a menos de 48 horas para que se conozca el veredicto que definirá la destitución o restitución del jefe de Gobierno porteño en el juicio político por la tragedia de Cromañón, volvieron a cruzar acusaciones. “La mayoría de los analistas dice que no nos conviene políticamente que se destituya a Ibarra”, reconoció el líder del frente opositor de centroderecha, aunque aclaró que ordenó a sus diputados “votar a conciencia” en el juicio político que se resolverá mañana en la Legislatura. Sin embargo, el empresario también dio por cierto que sus legisladores ya le bajaron el pulgar al suspendido gobernante de la Ciudad cuando afirmó que el décimo voto (para alcanzar la mayoría necesaria para la destitución) dependería del kirchnerismo. Ibarra insistió en que el empresario “está haciendo un manejo político de la tragedia” y afirmó que “él cree que me mata, yo creo que se suicida”.

“La mayoría de los analistas dice que no nos conviene políticamente que se destituya a Ibarra y yo puedo acordar con eso, pero nosotros buscamos la verdad”, dijo Macri sobre el juicio político que se sustancia en la Legislatura de la Ciudad. Señaló que les pidió a sus legisladores que forman parte de la Sala Juzgadora “votar a conciencia”. Pero el diputado nacional y presidente de Boca volvió a cargar contra el suspendido jefe de Gobierno al cuestionar que Ibarra “se ponga como víctima, cuando las únicas víctimas son los chicos que murieron y los familiares que perdieron a sus seres queridos”, tras lo cual volvió a criticar la actitud “de los medios de comunicación”.

En declaraciones radiales, el empresario también admitió que la decisión política de su partido de votar a favor de la destitución estaba tomada y trasladó la responsabilidad al kirchnerismo de reunir los diez votos necesarios (de los 15 miembros de la Sala) para conseguir el desplazamiento del jefe de Gobierno porteño. “Si nos paramos en nueve votos, el 10 sería de un hombre del Presidente, podemos decirlo de esa manera”, explicó Macri.

El kirchnerismo de la Legislatura porteña tiene a tres hombres en la Sala Juzgadora: Helio Rebot, Elvio Vitali y Sebastián Gramajo. Macri volvió a meter presión con sus declaraciones, ya que en todos los conteos previos aparecen como los legisladores que inclinarían la balanza para un lado o el otro en el juicio a Aníbal Ibarra.

Desde la vereda de enfrente, Ibarra consideró que el líder opositor “está haciendo un manejo político de la tragedia y esto le va a traer un alto costo porque la sociedad no quiere que se politicen las tragedias”. El suspendido mandatario volvió a cuestionar con dureza a Macri, al que acusó de “no tener límites”.

“El cree que me mata, yo creo que se suicida”, continuó el suspendido mandatario sobre la decisión política asumida por el dirigente del PRO y apoyado en todas las encuestas de opinión que afirman que la mayoría de los porteños se pronuncian a favor de la continuidad de Ibarra. “Macri es el único que cree que en este juicio se averiguó la verdad, sólo él, ya ni (Ricardo) López Murphy lo dice”, manifestó Ibarra explotando las supuestas divergencias dentro del bloque centroderechista en la Legislatura porteña.

Fuentes ibarristas adelantaron que su jefe político estará presente en la Legislatura para presenciar el desenlace de la votación que decidirá su suerte como jefe de Gobierno. Ibarra ya asumió su propia defensa política y decidió ponerle el cuerpo en el recinto, donde uno a uno y por orden alfabético, los 15 legisladores de la Sala argumentarán su voto por la destitución, la absolución o la abstención. Allí también estarán los familiares de las víctimas de Cromañón que impulsan su alejamiento.