EL PAíS
“El espacio progresista se tiene que juntar con vocación de poder”
El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, admitió que “está pensando” en candidatearse para una reelección. Espera que el acuerdo con Carrió y Kirchner supere el tema de la caducidad de los mandatos.
Por Santiago Rodríguez
Aunque no lo admita públicamente, Aníbal Ibarra ya está en carrera por su reelección en la Jefatura de Gobierno porteño. De hecho, ayer declaró a Página/12 que está “pensando” en su candidatura y que “próximamente” tomará una decisión al respecto. Es lógico que así sea: él mismo aceleró los tiempos al anunciar el adelanto de las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires, una decisión que de todos modos atribuyó a la necesidad de concretar una “renovación total” de la política y desvinculó de cualquier tipo de “especulación en términos electorales”. Ibarra también señaló que la coincidencia con Elisa Carrió en impulsar la caducidad de los mandatos “puede ser” la base de un acuerdo mayor de todo el espacio progresista.
–¿Por qué decidió finalmente adelantar las elecciones?
–La convocatoria del gobierno nacional aceleró los tiempos e instaló un debate sobre una renovación parcial o total. Adhiero a esta última posición y, por lo tanto, debía ser consecuente con ese pensamiento.
–¿Qué consideraciones hizo para tomar esa decisión?
–Con sinceridad, no realicé ninguna especulación sobre la conveniencia o no en términos electorales; todavía no lo sé, pero sí estoy convencido de que es necesario en estos momentos y que es lo que reclama la gente.
–Usted dice que no hizo especulaciones en términos electorales, ¿quiere decir entonces que piensa en su posible candidatura?
–Estoy pensando en el espacio al que pertenezco y, por supuesto, también en mi candidatura, aunque es una decisión que tomaré próximamente.
–¿En cuánto tiempo?
–Próximamente.
–¿En función de qué tomará la decisión de lanzar su candidatura?
–No son decisiones menores y por eso deben ser bien analizadas.
–¿Piensa que determinaciones como la suya, la de Carlos Reutemann en Santa Fe y reclamos como el de Elisa Carrió pueden llevar finalmente a que haya una renovación total de los mandatos en todo el país?
–Lo importante es que ocurra, y no si es por la posición de Reutemann, de Carrió o la mía, porque la profundidad de la crisis requiere un antes y un después; requiere empezar a construir una nueva Argentina.
–¿El recambio es suficiente?
–Por eso dije empezar a reconstruir. En ningún caso las elecciones son soluciones mágicas y eso es necesario aclararlo porque los argentinos nos acostumbramos a fantasías, como que estábamos en el Primer Mundo o que el peso valía un dólar y no era cierto, y ahora podemos creernos que con elecciones se soluciona todo. Es un paso, no es menor porque brinda legitimidad y permite reconstruir confianza, pero sea el gobierno que fuere tendrá que afrontar una Argentina muy complicada y tomar decisiones muy difíciles para empezar a arrancar.
–¿Cuál cree que es la principal traba que frena el recambio?
–La especulación sobre si conviene o no en términos electorales.
–Ya hay cuestionamientos a su convocatoria a elecciones. Por ejemplo, los peronistas que acompañan a Rafael Bielsa sostienen que es necesario modificar la Constitución antes de las elecciones para hacer una verdadera reforma política ¿Tendrá apoyo suficiente en la Legislatura para imponer su criterio?
–Para la reforma política no se necesita ninguna reforma de la Constitución; es más: los legisladores debieran sancionarla rápidamente, eliminando las listas sábanas, posibilitando las candidaturas independientes y rompiendo el monopolio de los partidos, para avanzar en las elecciones de marzo con nuevas herramientas.
–El legislador Carlos Campolongo también lo criticó y dijo que su planteo es “engañoso” y “gatopardista”.
–Entiendo que cada legislador quiera cumplir su rol de opositor, pero me parece que en esta Argentina en crisis sería bueno que por lo menos nos pusiéramos de acuerdo en la necesidad de la reforma política, de adelantarlas elecciones y de la caducidad de los mandatos. Si la filosofía es ver lo que hace el otro para oponernos, es difícil que podamos encontrar la salida a la situación que tenemos.
–¿La coincidencia con Carrió en armar una suerte de frente para promover la caducidad de los mandatos puede ser el principio de un acuerdo mayor en términos electorales?
–Puede serlo y sería importante que las coincidencias no queden sólo en la caducidad de los mandatos. Aquí va a haber una disputa de un proyecto de Argentina y es necesario que el espacio progresista se junte y avance con vocación de poder y de gobierno.
–¿En los últimos tiempos nota algún cambio de actitud en pos de alcanzar un acuerdo que sume al armado de ese espacio?
–Estoy viendo una mayor voluntad y la aceleración de los tiempos contribuyó a eso. Las condiciones están dadas y ahora hay que estar a la altura de las circunstancias.
–¿El santacruceño Néstor Kirchner también debe sumarse a ese espacio?
–Debe formar parte de ese espacio, pero para eso es necesario que se decida a romper con el justicialismo.
–¿Y los radicales que lo acompañan en su gestión?
–Hay sectores del radicalismo que han defendido hasta el último día al gobierno conservador de (Fernando) De la Rúa y también a (Domingo) Cavallo, que no formarán parte de ese espacio ni creo que quieran hacerlo.