EL PAíS › LOS RADICALES DEBATEN QUE HACER CON LA CORTE
Alfonsín presiona a su tropa
Hasta ahora son minoría los diputados de la UCR dispuestos a poner fin al juicio político a la Corte. Pero ayer Alfonsín hizo declaraciones que son una presión para apoyar al Gobierno.
Por Felipe Yapur
“El bloque, por ahora, mantiene firme su posición de no dar quórum el jueves en la sesión especial por el juicio político a la Corte”, aseguró ayer a Página/12 el diputado radical Ricardo Vázquez. El “por ahora” de la frase del legislador da cuenta del estado deliberativo en que se encuentra la bancada. Situación que cobró intensidad luego de que el ex senador Raúl Alfonsín aseguró, en referencia al polémico tema, que “en medio de la terrible crisis económica y social que vive la Nación Argentina, no se puede mantener un conflicto de tamaña naturaleza y tan extendido en el tiempo entre dos poderes del Estado”.
Palabras más, palabras menos, la frase del ex presidente radical se parece mucho a la de Eduardo Duhalde, quien la semana pasada dijo en una conferencia de prensa que el juicio a la Corte “es un tema muy delicado. Mi opinión es que en medio de una campaña electoral, como la que estamos, no es el momento, me parece a mí, para analizar con objetividad estos temas. Todo se politiza y eso es muy malo”.
Alfonsín apuntó al costado institucional del conflicto y, si bien aclaró que sus dichos no deben tomarse como una toma de posición a favor o en contra del juicio, su frase resquebrajó lo que hasta ahora parecía una posición firme de la bancada. “Esta semana no bajamos porque no queremos favorecer la impunidad de los jueces de la Corte”, reconoció a este diario un integrante de la mesa de conducción del bloque radical. Y agregó que en una sola oportunidad había hablado de este tema con Duhalde. El ex senador dijo que eso ocurrió hace “bastante tiempo”, pero su aclaración dejó más dudas que certezas en el ambiente radical.
Hoy, los radicales se reunirán en dos oportunidades para debatir la posición de la bancada. Al mediodía la conducción de Diputados se reunirá con el Comité Nacional, pero durante la tarde la totalidad del bloque recibirá al Comité.
En la bancada radical, que de tanto en tanto se muestra como opositora, hay al menos tres posiciones. Por ahora, son minoría quienes coinciden con la posición del menemismo y el duhaldismo de terminar con el juicio a los supremos. Allí militan los legisladores que responden, curiosamente, a Alfonsín. El resto de los diputados radicales se distribuyen entre los que se niegan a dar quórum hasta que se renueven las bancas en el Congreso y un tercer grupo que habla de resolver el caso de la Corte pero “recién cuando haya garantía de transparencia para la sesión y mayor consenso entre las distintas fuerzas políticas”.
La posición de los radicales comenzará a definirse hoy pero lo que surja de allí no implicará la participación de la sesión especial que el justicialismo solicitó para el jueves a las 11.30. El justicialismo sabe que ese día no habrá debate y que los tendrá sentados en sus bancas sólo a ellos y a los representantes de los partidos provinciales. Igual, los diputados del PJ saben que en algún momento la sesión se producirá.
Por ahora, los duhaldistas creen que el hecho de que el jueves se convoque a debatir el tema de la Corte les servirá para distender la relación con los supremos y el gobierno nacional. Los menemistas, a su turno, dan por sentado que han comenzado a recorrer el final del juicio.
Hay un solo detalle que genera preocupación en las huestes justicialistas y es que el radicalismo exija una sesión ordinaria para debatir el polémico tema. No es menor el dato porque el duhaldismo teme que si el dictamen se incorpora en la agenda de las sesiones ordinarias el funcionamiento de la Cámara corre riesgo de frenarse. Hasta el momento todas son simples especulaciones.