El titular de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario, Oncca, Ricardo Echegaray, expresó su alarma porque, a tres semanas de que venza el plazo para completar los embarques de carne con destino a la Unión Europea, aún quedan sin exportar más de 1500 toneladas correspondientes a la cuota Hilton. Dicha cuota es el cupo para cortes enfriados vacunos sin hueso de alta calidad (bife angosto, cuadril y lomo, que conforman el cuarto trasero), que anualmente otorga la UE y se distribuye entre los frigoríficos locales que cumplan con una serie de requisitos sanitarios y económicos. El valor promedio actual para estas operaciones alcanza los 17.000 dólares por tonelada. La Oncca responsabilizó al sector privado del mencionado desfasaje por “no actuar con responsabilidad”, diferenciándose de un comunicado anterior de la Secretaría de Agricultura, justificando las demoras de tramitación en “los desequilibrios en el normal abastecimiento de materia prima para la producción de cortes de alta calidad, por las recientes circunstancias del mercado agropecuario”.

Las 1510,8 toneladas que aún no fueron embarcadas se reparten entre 62 adjudicatarios de cupos. Pero sólo cinco concentran más del 60 por ciento (913 toneladas). Ellos son los frigoríficos Morrone (504 toneladas), Látigo (131,3), Subpga (100), FV (90,6) y Sadowa (87 toneladas). Otros 20 frigoríficos acumulan el grueso de las casi 600 toneladas restantes, con cifras por establecimiento superiores a las 10 toneladas. En su mayor parte, ni siquiera iniciaron el trámite del Registro de Operaciones de Exportación de Carnes (ROE Rojo), que los habilita a trasladar las carnes por las rutas.

“Vamos a tomar medidas ejemplificadoras con quienes incumplan sus compromisos”, expresó Echegaray, “pudiendo otorgársele una calificación negativa para la futura distribución”, en relación con los cupos que representan un privilegio y una reserva de mercado para el adjudicatario. Para la temporada 2007/2008, Argentina tuvo asignadas 28 mil toneladas (por un valor total, a precios de hoy, de 476 millones de dólares), y aspiraba a tener mil toneladas más en el año que se inicia en julio. De no cumplir con los envíos por las 28 mil actuales, Argentina podría perder parte de su cuota.

Por otra parte, la Oncca dictó una resolución por la cual obliga a los productores a informar, a partir de ahora, si poseen granos u oleaginosas sin ingresar en el circuito comercial. La necesidad de contar con información fehaciente en relación con la existencia de granos está relacionada con la sospecha de que podría haber hasta cuatro millones de toneladas de trigo fuera del circuito legal, comparando las estimaciones de cosecha del último ciclo con las cantidades comercializadas y las existencias declaradas en almacenamiento. La obligación de informar define como “productor a toda persona física, jurídica o asociación, (ya sea) como fideicomiso o pool de siembra, que produzcan granos u oleaginosas en una unidad productiva explotada en forma directa bajo cualquier título”.

Finalmente, a través de una resolución aclaratoria, el mismo organismo especificó los datos que debe informar la industria láctea para acceder a las compensaciones correspondientes a las operaciones declaradas entre el 1º de noviembre y 31 de enero últimos. La Oncca verificará, antes de autorizar la compensación, si la cantidad de leche declarada por las usinas fue efectivamente destinada a manufactura para su posterior consumo en el mercado interno.