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La posibilidad de que el gobierno nacional destine 400 de los 600 millones de dólares de un crédito del Banco Mundial para normalizar el pago de los sueldos docentes en las distintas provincias reabrió las negociaciones con el gremio docente. La Federación de Trabajadores Argentinos (Ctera) decidirá el próximo 7 de marzo qué hacer con la reinstalación de la Carpa Blanca si no se asegura el pago del incentivo. En principio, sólo está asegurado el financiamiento de la deuda de un semestre del 2001, el gremio reclama todo el año 2002 y la continuidad de ese plus salarial.
El argumento de la Ctera es que “si ese dinero se utilizará para permitirle a las provincias que paguen en tiempo y forma los sueldos y se pongan al día con las deudas, se podría usar también para superar la emergencia y pagar el incentivo atrasado que también es deuda”. Mientras tanto, en Diputados se comenzó a analizar un proyecto de ley que acordaron los ministros de Educación de todo el país para encontrar fondos genuinos y sostener el incentivo. Una alternativa es destinar parte de lo recaudado por el impuesto al cheque. Las negociaciones son contrarreloj y en el Gobierno no están convencidos de usar fondos del crédito del Banco Mundial para el pago de incentivo, aunque sea a cuenta de la futura recaudación.