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- Víctor Abramovich (Centro de Estudios Legales y Sociales-CELS): El CELS manifiesta su rechazo a los indultos a Enrique Gorriarán Merlo y al carapintada Mohamed Alí Seineldín, que anunció el presidente Eduardo Duhalde. Estos indultos menoscaban la actuación de la Justicia en delitos que atentaron contra las instituciones democráticas y provocaron la pérdida de vidas humanas. Es preocupante que, a pocos días de iniciar un nuevo período institucional al que la sociedad le reclama profundizar la democracia, se tome una medida basada en operaciones políticas, que vulnera el valor de la ley y la confianza en la Justicia. Es aún más preocupante que el presidente Duhalde, al justificarlos, afirme querer “clausurar” una etapa pasada de “enfrentamientos”. Así reitera la idea perversa de que se puede clausurar la historia por decreto y que el futuro se puede condicionar con decisiones arbitrarias. Paradójicamente, cuando existen negociaciones políticas que impulsan la clausura de los juicios por los crímenes del terrorismo de Estado, estas expresiones contribuyen a crear un escenario propicio para este desenlace.
- Mercedes Meroño (vicepresidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo): “Las Madres nos pronunciamos en contra de todos los indultos presidenciales ya que permitieron, por ejemplo, a Carlos Menem dejar libres a los asesinos de la dictadura militar. Esta decisión, además, refuerza la teoría de los dos demonios. Por otra parte, debemos distinguir: Seineldín es nuestro enemigo porque levantó a los militares contra un gobierno constitucional. Entre los errores de los amigos y los crímenes del enemigo, nos quedamos con los amigos”.
- Adolfo Pérez Esquivel (Premio Nobel de la Paz-Serpaj): “Considero que habría que retirar la facultad presidencial de indultar porque se cometen locuras como la libertad de Videla. El indulto debe ser un momento de reflexión del pueblo argentino para que no ocurra nunca más. Estas personas que se creyeron en actitudes mesiánicas que iban a salvar al país, en realidad, lo han perjudicado. Esto ha costado vidas al pueblo argentino y tiene graves consecuencias para la vida democrática e institucional del país. Esta es una decisión política de un gobierno que se va, que le limpia el camino al que llega”.