“Vamos a ser respetuosos del debate parlamentario”. Con esa frase esquivó ayer el jefe de Gabinete, Marcos Peña, una definición respecto del proyecto de paridad de género que obtuvo dictamen esta semana en la Cámara de Senadores. La iniciativa, impulsada por senadoras y senadores de distintos bloques opositores, contempla un cupo de mujeres del 50 por ciento para cubrir los cargos legislativos, ampliando el actual sistema que es de un tercio. Consultado por la senadora del FpV Marina Riofrío, presidenta de la comisión de la Banca de la Mujer, el funcionario aclaró que están conceptualmente de acuerdo con “la paridad entre el hombre y la mujer” pero evitó expresarse sobre el texto que se debate también en la Cámara de Diputados. Además, varios senadores le reclamaron a Peña por la puesta en funcionamiento del cuerpo de abogados para víctimas de violencia de género, que fue aprobado por ley este año y aún no está en marcha. El jefe de gabinete sostuvo que la semana próxima designarían al responsable del grupo de abogados y en pocos días más comenzarán los concursos para cubrir las vacantes.