EL PAíS
¿Cómo seguir la negociación?
- EDUARDO CURIA, asesor del Ministerio de Planificación
“Hay que afinar el lápiz”
“La Argentina no puede hacer concesiones unilaterales en el proceso de reestructuración de la deuda. No puede ser que todos le pidan a la Argentina buena fe: ¿Y por casa cómo andamos? El G-7 tiene que equilibrar su posición respecto de los acreedores y hay que preguntarles a los países miembro qué pueden aportar para avanzar en la reestructuración porque acá somos todos culpables. Partiendo de la propuesta inicial del Gobierno, que es válida como portadora de un núcleo duro filosófico que hay que sostener, hay que entrar en una fase virtuosa de afinar el lápiz pero eso requiere del concurso general. Si en algún momento por vía reservada uno llega a un acuerdo que tendría lógica económica, creo que aún las posturas más declamadas se pueden explicar y decir esto es lo que pasa y es lo mejor para el país. Estoy convencido de que a esta altura la estrategia nuestra tiene que reconocer esa adecuación sutil, y moralmente poner a los acreedores en el brete de obligarlos a discutir la propuesta argentina.”
- RODOLFO TERRAGNO, senador de la Unión Cívica Radical
“Carecen de estrategia”
“El presidente Néstor Kirchner carece de una estrategia frente a los tenedores de bonos argentinos. El tiene razón cuando dice que los inversores tuvieron ganancias exageradas y tiene razón también cuando reclama quitas y esperas significativas, pero debilita su posición con su actitud de político en campaña. Como está planteada la cosa vamos mal. Si Kirchner sale a insultar o a mojar la oreja de los acreedores en default, la posición argentina va a empeorar. El arte de negociar con alguien que es muy poderoso consiste en hablar poco y suave pero sacarle todo lo posible. El doctor Kirchner habla mucho y fuerte pero no saca nada. No saca nada con el Fondo y, a la vez, los bonistas le plantean: ¿por qué el Fondo es un acreedor privilegiado? Está bien que el Presidente sea durísimo en la negociación, pero si sale a insultar, a decir: ‘Si les gusta bien y si no también’ y a hacer cortes de manga, les va a hacer muy poco favor a su gobierno y al país.”