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“La Argentina está claramente bloqueada y lo que han planteado el conjunto de los países que nos pueden comprar es que hay que cumplir con los requisitos del FMI. Como el país no los ha cumplido, no hay acuerdo marco y, en consecuencia, no nos compran productos”, explicó ayer sin medias tintas el canciller Carlos Ruckauf. Recién llegado de la gira por Europa que realizó el presidente Eduardo Duhalde, el canciller calificó como “una presión, porque así fue dicho con todas las letras” el planteo de países como España e Italia en el sentido de que ningún país desarrollado ayudará a la Argentina hasta tanto no se alcance un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Ruckauf insistió en que la firma con el FMI está supeditada “a tres prerrequisitos, caída del déficit de las provincias, ley de subversión económica, y ley de quiebras” que no pudo precisar cuándo se cumplirán porque para eso es necesario “un andamiaje parlamentario y de las provincias”.