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“Con la ley de lemas están buscando embarrar la cancha.” La frase la repiten, sin excepción, los diputados menemistas, delasotistas y duhaldistas. Todos se acusan mutuamente de ser los verdaderos impulsores del proyecto que presentó el jueves en el Senado el reutemista Oscar Lamberto. Sólo los seguidores de Eduardo Duhalde mantienen una posición que los diferencia del resto. No se oponen con tanta virulencia y por tal motivo dejan abierta la posibilidad de que se recurra al sistema de lemas si es que no hay consenso. En la vereda opuesta los únicos que apoyan a rajatabla la iniciativa son los seguidores de Carlos Reutemann. Estos especulan con la posibilidad de reinstalar al Lole como candidato presidencial. Cada cual atiende su juego y el PJ no encuentra el mejor mecanismo para resolver la representación, con ciertos matices, del modelo económico y social de exclusión vigente.
- El no del menemismo. El ex secretario general de la Presidencia Alberto Kohan consideró como una buena herramienta la utilización del sistema de lemas para definir la elección del próximo presidente. Fue el único de este sector, Adrián Menem, diputado y sobrino del ex presidente, jura que todo se trata de “un nuevo papelón, de un nuevo capricho de Duhalde porque de lo contrario hubiera respetado la ley de internas abiertas que se votó en el Congreso”. Sorpresivamente, el legislador despegó a Reutemann de la maniobra. Consideró que con esta iniciativa “la interna peligra” y para que no quedaran dudas de la responsabilidad de Duhalde en este proyecto agregó que “el Presidente ya destruyó el país, también a los partidos y ahora quiere hacer lo mismo con el justicialismo”. A modo de síntesis, el sobrino presidencial aseguró a este diario que “lo único que se pretende es embarrar la cancha”.
- La furia delasotista. Carlos Alessandri es diputado por Córdoba y uno de los referentes del gobernador y precandidato presidencial José Manuel de la Sota. Al igual que su colega menemista, el legislador cordobés aseguró que se está “embarrando la cancha” y destacó que el proyecto de Lamberto es funcional a las aspiraciones Menem, quien “se sabe derrotado en internas transparentes”. “Esto lo hacen las viudas del Lole que no terminan de hacer el duelo por su jefe”, ironizó Alessandri. Agregó que con el objetivo es impedir la definición del liderazgo del justicialismo” y, por lo tanto, reutemistas y menemistas acordaron conseguir “que nadie tenga el poder” porque “le tienen miedo al voto de la gente”. Alessandri tiene respuesta para todo, en cuanto a que el mismísimo De la Sota fuera uno de los impulsores de la ley de lemas a poco de la huida de Fernando de la Rúa, dijo que “era otro escenario político. Ahora hay tiempo para hacer internas sin problemas”.
- El ni duhaldista. José María Díaz Bancalari es el más fiero defensor de Duhalde en el Congreso. Considera que el mecanismo propuesto por Lamberto es el peor de todos para solucionar el problema de la interna y que puede “perjudicar” la definición del candidato peronista. Sin embargo, no es tan tajante a la hora de considerarla como la peor de todas. Como Duhalde frente a los senadores, Díaz Bancalari deja una puerta abierta a la posibilidad de que se recurra a esa herramienta en caso de que “no se consiga el consenso necesario para respetar los decretos que norman los próximos comicios”. Por ahora todo indica que el dichoso consenso no llegará nunca.
- El sí de los santafesinos. El senador Lamberto lanzó la bomba y partió en silencio para Santa Fe. El que habló fue otro hombre del Lole, el ex gobernador y diputado Jorge Obeid. Como era de esperar, el legislador respaldó el proyecto y aseguró que con esta medida “se logra la eliminación de la interna”. Y, para despejar cualquier duda, reconoció queel sistema de lemas “le permitirá a Reutemann recuperar la escena política”.