A pesar del optimismo reflejado por el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, quien manifestó la existencia de una “perspectiva positiva” para que la Argentina y Uruguay alcancen un acuerdo en el conflicto pastero, tanto el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, como el mandatario Tabaré Vázquez bajaron las expectativas, negando haber encontrado por el momento una salida al diferendo.

Con la cumbre de Naciones Unidas como telón de fondo, Zapatero abordó ayer el tema en Nueva York. La ciudad será sede de una cumbre, el próximo sábado, en donde representantes de España, la Argentina y Uruguay buscarán una solución al conflicto generado por la construcción de la pastera finlandesa Botnia en Fray Bentos.

Rodríguez Zapatero blandió su optimismo frente a una consulta periodística, basada en que España –a través del embajador Juan Antonio Yáñez Barnuevo– brinda “buenos oficios” en el pleito.

A propósito, Yáñez Barnuevo será el anfitrión de la reunión del sábado, a la que asistirán Alberto Fernández, el canciller Jorge Taiana (por la Argentina), el secretario general de la Presidencia uruguaya, Gonzalo Fernández, y el ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Reinaldo Gargano.

Frente a las expectativas creadas, y las declaraciones de Zapatero, Alberto Fernández señaló que si bien es cierto que la Argentina está procurando avanzar en una salida al conflicto, aseguró que hay “un escenario muy dificultoso” a raíz de las “posiciones contrapuestas”. No avizora, en ese sentido, una solución en el corto plazo.

“Mientras el diálogo exista, es bueno, y tenemos que tratar de ver si nos podemos encontrar en algún punto. Pero me parece un poco exagerado decir que el tema está resuelto”, indicó, minimizando las versiones periodísticas publicadas el fin de semana que señalaban que el conflicto pastero estaría en vías de solución.

Por su parte, Vázquez machacó con la idea de un “monitoreo conjunto del medio ambiente”, algo que sistemáticamente fue rechazado por la Argentina, que caracteriza a Botnia como un emprendimiento “ilegítimo” y que debería ser “relocalizado”. El presidente uruguayo advirtió que, de todos modos, la idea del monitoreo conjunto “no se trata de una negociación”.

“Estamos dialogando con la Argentina una salida al conflicto de ambos países sin negociar absolutamente nada”, afirmó una y otra vez el mandatario durante una caminata que hizo esta mañana por calles de Montevideo. De esta forma, Vázquez también morigeró el optimismo que hizo público la semana pasada en Madrid, donde llegó a visualizar la posibilidad de un acuerdo con la Argentina para “antes de fin de año”.