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Por M. B.

“Tenemos un país destruido, sin satélites ni gran desarrollo tecnológico propio, por lo tanto la única posibilidad de negociación que nos queda es a través de lo que nosotros llamamos ciudadanos y ellos consumidores”, confió Martín García, asesor de la Comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados a Página/12. Si el plan craneado por DirecTV sigue en pie hasta el final, la televisación de la totalidad de los partidos del Mundial Corea-Japón 2002 corre el riesgo de no ser emitida para todo el país. Esta preocupación se discute en Diputados: el justicialista Ricardo Quintela redactó un proyecto de ley que pretende “asegurar la emisión de todos los partidos del Mundial”, por considerarlo discriminatorio frente al ejercicio de la libertad de información y entretenimiento. Ayer se encontraron frente a frente diputados y asesores con cuatro representantes de DirecTV Latinoamérica, quienes dieron su respuesta: “No estamos de acuerdo con el proyecto”, explicó Emilio Beccar Varela, representante legal de DirecTV Latinoamérica.
La transmisión de los partidos de la Selección Nacional fue asegurada por la Ley 25.342, aunque el resto, esta vez, amenaza con quedar fuera del alcance de la televisión abierta. Los derechos de televisación (que incluyen el Mundial 2006 y otros campeonatos menores) fueron adquiridos por 441 millones de dólares por el grupo DirecTV LA a la empresa ISMM AG, para explotar la transmisión en Argentina, Chile, Uruguay, Colombia, Venezuela y México (a nivel mundial la FIFA vendió los derechos por un total de 2000 millones de dólares). Si bien la apuesta de DirecTV es recuperar la inversión aumentando la cantidad de abonados, revendiendo licencias a otros medios y vendiendo publicidad, la Comisión de Diputados estima que puede haber monopolio por una “metodología abusiva de sus derechos”, como explica el mismo Quintela en la fundamentación del proyecto. Beccar Varela contestó: “El año pasado trabajamos en un acuerdo de coproducción con Canal 7 para que se emitieran 30 partidos por la señal estatal, aunque todo se detuvo luego de los agitados días de diciembre”.
Entre los 30 partidos están asegurados el partido inaugural, las semifinales, el de tercer y cuarto puesto, la final, además de las emisiones de otros partidos del mismo grupo en donde jugará Argentina (Suecia, Nigeria e Inglaterra), como los del grupo de donde saldrá quien enfrente a la Argentina si pasa a segunda ronda (México, Italia, Croacia y Ecuador). Si no se aprueba la ley, los otros 34 partidos quedarían a merced del interés de los canales de aire privados que todavía no cerraron contrato con la firma. La otra opción será sólo para abonados de DirecTV, unos 300.000 en todo el país. Por ahora, DirecTV Latinoamérica (que a su vez venderá los derechos a DirecTV Argentina) espera que la ley no sea votada en el Congreso, ya que viene preparando una superproducción de canales y cámaras especiales que su tecnología digital permite desarrollar. Habrá que ver si alguien le saca la pelota antes que comience el partido.