La ley era conocida como “Don’t ask, don’t tell” (No preguntes, no digas) y se refería a que los homosexuales en las filas militares norteamericanas debían mantener su condición en secreto para no ser echados. La norma fue abolida por el Senado el 18 de diciembre de 2010, pero recién ayer Barack Obama anunció que la supresión se hará efectiva. El presidente aseguró al Congreso que ahora sí estaban dadas las condiciones para el cambio: el Pentágono se tomó todos estos meses para elaborar manuales y preparar al conjunto de las Fuerzas Armadas para recibir a los militares abiertamente gays.