El público de la Creamfields, esa megafiesta de música electrónica que se celebrará hoy en el autódromo porteño, tendrá, al igual que el año pasado, un operativo de prevención y asistencia médica. Consultado por PáginaI12, el jefe de Toxicología del Hospital Fernández repasó algunos detalles de la intervención de su equipo. “Vamos a tener un stand para repartir folletos con datos de prevención y en las pantallas gigantes van a pasar frases enfocadas en la reducción de daños como ‘vos conocés el límite’”, contó el doctor Carlos Damín. “También nos aseguraron que no van a vender vodka”, agregó, ya que su ingesta puede ser fatal si se lo combina con drogas sintéticas ilegales como el éxtasis, frecuentes en este tipo de recitales.

“En principio nos pidieron que estuviéramos para garantizar que no se cortara el agua”, dijo Carlos Damín, al tiempo que aseguró que en la edición anterior se quedó hasta las 4 y no hubo mayores problemas. Según detalló este toxicólogo, las dos ambulancias del SAME dispuestas aquella vez sólo trasladaron a un chico muy ebrio y drogado, que se recuperó pronto. El resto de las personas que fueron atendidas, unas veinte, no presentaban cuadros complicados y se las atendió allí mismo. “Un dato interesante si uno piensa que fueron más de 65 mil personas el año pasado”, reflexionó Damín.

La policía, según fuentes del Ministerio de Justicia, prestará ayuda en caso de incidentes o de urgencias y evitará en lo posible cualquier tipo de cacheo en busca de drogas para criminalizar al público. Ayer, en la Sedronar , nadie pudo confirmar la presencia o participación de esta institución en el evento. El año pasado, la Sedronar instaló una carpa en las afueras del autódromo con el único fin de informar, abstractamente, sobre los peligros del éxtasis.