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Un grupo de cuatro activistas de la organización ecologista Greenpeace, que en el marco de una protesta había logrado ingresar en la embajada de Australia en Buenos Aires, fue demorado durante 45 minutos e interrogado dentro del edificio por personal de seguridad de la sede diplomática y de la Policía Federal. El hecho ocurrió en la tarde de ayer en un escrache frente al edificio ubicado en Zabala y Luis María Campos para protestar por “las presiones que ejerce la diplomacia australiana para que se apruebe un acuerdo nuclear que implica el ingreso de residuos radiactivos”, informó Greenpeace. Casi una decena de militantes burló al personal de seguridad de la embajada, subió al segundo piso y llegó hasta la oficina de la embajadora Sharyn Minahan. Allí colgaron dos carteles, uno en inglés y otro en español, con la leyenda: “Australia, Argentina no quiere tu basura nuclear”, que más tarde fueron retirados por la propia embajadora.