Bastó que la Corte Suprema de Justicia anunciara que la feria judicial llega hoy a su fin para que se iniciara la revuelta. La acordada con la decisión se dio a conocer durante la mañana de ayer. Al mediodía, en Internet, los foros de empleados judiciales ardían de quejas porque el abrupto fin del descanso dejaría reservas de paquetes turísticos en veremos. Y poco después la Unión de Empleados Judiciales de la Nación (UEJN) y el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal (CPACF) escucharon la voz del soberano del sector y solicitaron, en un escrito presentado al presidente Ricardo Lorenzetti, que la feria se extendiera una semana más, puesto que al temor por la gripe A se sumó la ola de frío polar. En la provincia de Buenos Aires los tribunales reanudarán las actividades el 3 de agosto pero, curiosamente, el demandante CPACF volverá a sus rutinas el próximo lunes 27.

La mecha fue encendida cuando la Corte ratificó lo que se presumía por una acordada anterior: que el último día de feria es hoy, por lo que el lunes los tribunales nacionales y federales radicados en suelo porteño deben volver a la normalidad. La publicación de la novedad en el sitio especializado Centro de Información Judicial (www.cij.csjn.gov.ar) desató, en cuestión de minutos, una andanada de comentarios. “¿Y qué hago con las reservas que hice para la semana que viene en Villa La Angostura? ¿No me puedo ir?”, se indignó, entre los comentarios pioneros, la usuaria “Lara Santi V”, mientras que casi al mismo tiempo el usuario “Diego” aducía falencias de etiqueta: “Aunque sea para mantener las formas hubieran prorrogado la feria junto a la provincia de Buenos Aires”. “MCC”, quizás mezclando un poco todo, se preguntaba: “¿No es esto también un poco más de inseguridad jurídica? Yo por las dudas empiezo desde ahora a poner en condiciones mi casita rodante, pues vaya a saber uno cuándo serán las vacaciones de verano –no nos olvidemos del dengue–”.

Otros comentadores, como “Juan”, se revelaban más preocupados por la escasa atención a los detalles: “¿Empleado con mujer embarazada –quien sí está contemplada como de riesgo– debe quedarse en su casa? Los médicos así lo aconsejan”. Poco después el debate y las inquietudes arreciaron, hasta que “El Ave Negra”, aun con deslices poco protocolares, dejó algo en claro: “Uy, alto bajón... yo que quería dormir y hacer la del mono tranquilo acá en Mar de las Pampas me voy a tener que volver antes”. No todos los comentarios, sin embargo, mostraban descontento por el fin del receso, como el de “Rica”, quien creía haber encontrado explicación por el inusual apego a las normas, porque “en grandísima medida, han sido recomendaciones o, directamente, directivas, para quedarnos en casa y no ir a trabajar”. Y aún más: hubo quienes retaron de manera poco cortés a quienes, con sus quejas, hacían quedar como “vagos” a todos los trabajadores judiciales, cuando “los magistrados y funcionarios que se quedaron en la mayoría de las dependencias agradecen la acordada de la Corte”, como señaló “Lady”.

Por pedido del UEJN y el CPACF, una acordada del 2 de julio disponía adelantar la feria, para que comenzara el 6 de julio y se extendiera hasta el 17, por haber “tomado conocimiento de la existencia de una pandemia de gripe A H1N1 con efectos en todo el territorio nacional” y para “preservar la salud del personal del Poder Judicial de la Nación” y “de todas aquellas personas que concurren a los tribunales y dependencias que lo integran”. Pero el 7 de julio, la acordada 23/09 extendió la feria hasta el 24 de julio inclusive, “por razones de salud pública”. La acordada de ayer sólo ratificó esas fechas, al anunciar que el lunes 27 la actividad judicial quedará normalizada.