Dos personas fueron asesinadas en distintos hechos delictivos en los que habrían intentado resistirse. Una de las víctimas fue un remisero atacado en la localidad bonaerense de Be-ccar, durante la noche del lunes, y la otra fue un agente de la Policía Federal muerto en la madrugada de ayer, en el barrio porteño de Villa Devoto. Ambos estaban en sus autos cuando fueron tiroteadas.

Alrededor de las 21 del lunes, Pedro Miño (57) levantó un pasajero en el Hospital de Boulogne con destino a La Cava. En el transcurso del viaje “hubo un forcejeo y, posiblemente, haya habido una resistencia que desencadenó un disparo”, indicó una fuente policial. El remisero murió producto de un impacto de bala que le ingresó en el pecho. Finalmente, el agresor huyó “sin robar nada”, aseguró la policía.

En el otro caso, el agente de la Policía Federal Manuel Aguirre (54), que se desempeñaba en el Departamento de Bomberos del aeropuerto de San Fernando, fue atacado por al menos tres asaltantes cuando iba a trabajar a bordo de su Volkswagen Gol Trend por el barrio de Villa Devoto. El hecho ocurrió a pocos metros del cruce de Lope de Vega y Nazarre, cerca de las 5.30.