Los dueños de tres importantes galerías de arte porteñas deberán explicar a la Justicia por qué aparecieron en sus depósitos parte de las 37 pinturas robadas en enero a un coleccionista. La División Interpol de la Policía Federal recuperó en los últimos días 29 de esos cuadros y detuvo a una persona tras realizar seis allanamientos en inmuebles pertenecientes a las galerías Zurbarán, Arroyo y Buenos Aires. En el marco de esta investigación se detuvo a Osvaldo Ryszelewski, identificado por los policías como el mediador de la venta de los cuadros, quien tenía nada menos que trece pedidos de captura.

“Todo empezó cuando el dueño de los cuadros robados caminaba por la calle Arroyo y vio en la galería uno de los cuadros que le habían robado”, indicó a Página/12 el subcomisario Marcelo El Haibe, de la sección Protección del Patrimonio Cultural de Interpol-Policía Federal.

El robo se produjo el 7 de enero en un domicilio del barrio de Villa del Parque, cuando el propietario –quien pidió no ser identificado– estaba de vacaciones. De allí fueron sustraídas 37 obras de destacados artistas nacionales, entre ellos, de Raúl Soldi, Vicente Forte y Juan Carlos Castagnino, con un valor promedio cercano a los 400 mil dólares. Además se llevaron electrodomésticos y otras pertenencias.

La causa quedó radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 49, a cargo de Facundo Cubas, quien dio intervención a la Protección del Patrimonio Cultural, de la Federal. Personal de esa fuerza allanó el 16 de abril la galería Arroyo, donde recuperó una obra de Horacio Buttler. Los investigadores descubrieron que el hombre que había entregado la pintura era empleado de otra galería, la Buenos Aires, ubicada en Esmeralda 661. Con ese dato, el 3 de mayo fue allanado el local de esa galería, donde se descubrió otra de las obras sustraídas, de autoría de Oscar Vaz. El juez resolvió entonces secuestrar la pintura y allanar ese local y otros locales. Fue así como se determinó que parte del material sustraído se encontraba en otros cuatro domicilios: dos galerías y dos depósitos vinculados con la firma Zurbarán.

En uno de los domicilios, ubicado en Cerrito 1530 y que servía como depósito de esta firma, se secuestraron 13 cuadros más y se obtuvo documentación de otras pinturas vinculadas con el robo. A partir del análisis de la documentación se determinó que además de las obras secuestradas en Zurbarán, había otras que se encontraban en el mismo depósito que no habían sido denunciadas por el damnificado, ya que no las tenía inventariadas.

Además, los investigadores encontraron otras piezas en un local de cafetería ubicado en Esmeralda 761. Allí se recuperaron ocho cuadros más y se obtuvo documentación que comprometía a Ryszelewski como interviniente en la venta y distribución del lote compuesto por pinturas y esculturas sustraídas. Otras seis personas, que actuaron como intermediarias, están imputadas. Posteriormente, por pedido del Juzgado Federal Nº 7, se allanó nuevamente el depósito de Cerrito 1530, donde se recuperaron otras seis obras de arte y se detuvo a Ryszelewski.

“Las obras robadas figuran en una lista publicada en Internet, que los galeristas, conocedores del tema, deben consultar antes de comprar”, dijo el subcomisario El Haibe.

“El éxito de esta investigación expresa los resultados del planeamiento del gobierno nacional para la preservación del patrimonio cultural”, expresó la ministra Garré.

Ahora, personal policial continúa la investigación para recuperar las ocho obras pictóricas que faltan. La causa se encuentra a cargo del juez Ricardo Arturo Warley, ya que Cubas se declaró incompetente en virtud de la conexión de delitos que obran contra Ryszelewski.