Por un gran incendio forestal en Cataluña, cuatro personas murieron entre fines del domingo y la noche de ayer, doce permanecen internadas y otras 1400 fueron evacuadas. Ayer, el fuego ya había arrasado con unas 13 mil hectáreas, y seguía avanzando, descontrolado, según informó el gobierno regional catalán, que atribuyó el fuego a una imprudencia humana. Las víctimas fatales, padre e hija, de nacionalidad francesa, perecieron el domingo por la tarde en los dos principales focos de incendio que afectan la provincia de Girona. Ambos murieron al saltar desde un acantilado hacia el mar, en un intento por salvarse de las llamas. La tercera víctima fue un español que sufrió un ataque cardíaco al ver que el fuego se acercaba a su propiedad.