SOCIEDAD › TRES MUERTOS EN UN ASALTO A UN ESTUDIO JURIDICO
Tarde de sangre en Varela
Mientras los operativos antiinseguridad desarrollaban su primer día de esfuerzos conjuntos, tres delincuentes enmascarados asaltaron un estudio jurídico en Florencio Varela. El hecho ocurrió durante la tarde. Los asaltantes no tenían idea (o no parecían tenerla) de que el estudio pertenece a un penitenciario, quien en ese momento atendía la consulta de un cabo de la Bonaerense. Ambos reaccionaron al escuchar los gritos de la secretaria del estudio en una oficina contigua y arremetieron a los tiros. Dos de los delincuentes murieron y el tercero huyó herido. El cabo recibió tres disparos y fue internado de urgencia. La secretaria, Silvia Benítez, de 29 años, murió de un balazo en el pecho. Ahora se investiga si el disparo partió de las armas de los delincuentes o de los defensores de la seguridad pública.
No está claro el motivo del asalto. Una hipótesis que sostienen los investigadores es que se trató de un asalto al voleo. La otra, un poco más insidiosa, descarta el robo al voleo y desconfía del motivo del asalto ya que en el estudio jurídico no había efectivo.
El estudio se encuentra en Irala 1462/70, entre Maximiliano Rodríguez y O’Higgins, de Florencio Varela. Pertenece al abogado Guillermo Bacquet, quien además es prefecto del Servicio Penitenciario y actualmente ocupa el cargo de jefe de la Alcaidía de los Tribunales de Quilmes. Poco después de las 16 de ayer, Bacquet recibió en su despacho al cabo primero de la Bonaerense Juan Marcelo Rodríguez, que cumple funciones en la Comisaría de la Mujer, en Don Bosco, Quilmes. Ninguno de los dos estaba en ese momento vestido con su uniforme.
El estudio de Bacquet se encuentra en un PH con tres departamentos comunicados entre sí por un pasillo. La reunión entre el abogado y el cabo primero se realizaba en el departamento dos. Mientras se desarrollaba la charla, ambos escucharon los gritos de Silvia Benítez, de 29 años, y secretaria del estudio, que era asaltada por tres hombres con sus rostros cubiertos con capuchas negras.
Tanto Bacquet como Rodríguez reaccionaron inmediatamente tomando sus armas y acudiendo en auxilio de Benítez. Se desató un tiroteo. Dos de los delincuentes murieron y el tercero resultó herido, pero logró escapar. La secretaria murió cuando la impactó un proyectil en el pecho. El cabo primero fue herido de tres balazos, uno en el pie, un segundo en la zona izquierda del tórax y un tercero en el dorsal derecho. Fue trasladado en estado muy grave primero al Hospital de Quilmes y luego al Churruca, donde se analizaba intervenirlo quirúrgicamente.
El fiscal de Quilmes Pablo Pérez Marcote ordenó el secuestro de una pistola Magnum 357, un revólver calibre 32, dos capuchas y las dos 9 milímetros de Bacquet y Rodríguez, para determinar cuál fue la que provocó la muerte de la secretaria.