Restos óseos aparentemente humanos aparecieron en un contenedor de basura en el barrio de Recoleta. El hallazgo ocurrió cuando el empleado de limpieza de la ciudad de Buenos Aires realizaba sus tareas en la calle Paraná al 900 y durante su recorrido se topó con una caja de cartón. El hombre levantó la tapa y se sorprendió al ver que estaba cargada con gran cantidad de huesos limpios, secos y de un aspecto que a su entender podían ser compatibles con los de los seres humanos. Por esta razón, el barrendero llamó al 911 y poco después llegaron al lugar efectivos de la comisaría 17ª y peritos de la Policía Científica. Los expertos constataron que, en principio, se trataba de huesos humanos de más de 20 años de antigüedad y que pertenecerían a una mujer.