Un ex policía bonaerense será juzgado a partir de hoy acusado de matar a balazos a un joven y herir al hermano de éste cuando ambos salieron en defensa de la mujer del policía, a quien éste golpeaba en la puerta de un bingo en la localidad de Adrogué. En principio, la Instrucción caratuló la causa como “homicidio agravado por alevosía”, sin desatender que el acusado era miembro de la fuerza policial. El hermano que sobrevivió a la agresión, ocurrida en 2013 será el testigo más representativo del juicio. En la instancia, que se llevará a cabo en los tribunales de Lomas de Zamora, acompañarán a la familia damnificada distintos organismos de derechos humanos.

Por el crimen de Mauro Silva está imputado Mario Correa, de 61 años. El debate se realizará mañana a partir de las 8 ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Lomas de Zamora, en el edificio situado en Camino Negro y Larroque, en Banfield. El ex policía trabajaba como custodio en la Municipalidad de Ezeiza, donde utilizaba la pistola 9 milímetros Bersa Thunder que le fue secuestrada luego del ataque. Correa llegó al juicio acusado de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” de Mauro Silva (26), en concurso con la “tentativa de homicidio” del hermano de aquél, Renzo Silva (21).

“Ojalá que se haga justicia porque está muy claro lo que ocurrió, los testigos vieron todo y las cámaras del bingo lo grabaron. Este policía tiró a matar a dos personas porque fueron a defender a una mujer”, dijo Celia Cueto, madre de las víctimas. Su hijo Renzo, quien recibió dos balazos en una pierna, será el testigo más importante del debate, ya que presenció toda la escena y luego vio morir al hermano en sus brazos. “El está mejor, se fue recuperando, pero una de las balas le pasó muy cerca de la arteria femoral, que le podría haber causado la muerte, y la otra le quedó alojada en la pierna”, recordó la madre.

El TOC 3 estará compuesto por los jueces Rafael Emilio Villamayor, Jorge Omar Camino y Marcelo Delaturre, y el fiscal será Sebastián Scalera, mientras que la familia Silva es representada por los abogados Laura Táccari, del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (Ceprodh), e Ismael Jalil, de la Coordinadora contra la Represión Policial (Correpi).

Durante la etapa de instrucción, los querellantes solicitaron que Correa fuera llevado a juicio por el delito de “homicidio agravado por alevosía y por resultar el imputado miembro de una fuerza policial”, cuya pena es de prisión perpetua. Sin embargo, esta calificación no fue acompañada por el fiscal Javier Martínez, quien consideró como único agravante el uso de arma de fuego, por lo que en el juicio intentarán una condena por el delito más grave. “Mauro fue un héroe que intervino en un caso de violencia de género y lo mataron”, sostuvo la abogada Táccari.

Además, la familia Silva estará acompañada por otros organismos de derechos humanos y por Carla Lacorte, quien quedó paralítica en 2001 luego de que un policía la baleara cuando regresaba de la facultad. “No vamos a permitir que el asesinato de Mauro quede impune porque la impunidad en la que quedan los casos de gatillo fácil y la brutalidad policial alimenta que las distintas fuerzas represivas sigan asesinando a nuestros jóvenes cada 28 horas”, sostuvo Lacorte.

El asesinato ocurrió la noche del 2 de julio de 2013, cuando los hermanos Silva comían en el local Pancho Bahía, cerca del bingo de Adrogué, en el partido de Almirante Brown. De pronto vieron que un hombre golpeaba y arrastraba de los pelos a una mujer en la puerta del salón de juegos. Poco antes, quienes a la postre resultaron ser marido y mujer fueron obligados a retirarse del lugar porque discutían y se insultaban. Una vez en la vereda, el hombre empezó a pegarle cachetazos y trompadas a la mujer, que no podía defenderse. Los hermanos primero intentaron frenar la golpiza gritándole al hombre, pero cuando se acercaron a defender a la mujer, identificada como Liliana Luna, el agresor sacó una pistola y le disparó dos veces a Mauro, provocándole la muerte en el acto. También fue herido de dos balazos su hermano, quien fue trasladado al Hospital General de Agudos Lucio Meléndez y quedó fuera de peligro.