SOCIEDAD
Un rebote insólito
El primer caso de “chaleco fácil” quedó registrado por un policía bonaerense. En Mar del Plata, un joven que asaltó a un vendedor ambulante fue perseguido por un patrullero. Uno de los policías bajó e intentó detenerlo. El joven se resistió, comenzó a forcejear con el uniformado y cuando intentó arrebatarle el arma ésta se disparó. La bala rebotó en el chaleco antibalas e hirió en el muslo al delincuente que fue detenido.