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Juan Pedro Schaerer, padre de Cristian, el joven correntino de 21 años que fue secuestrado hace 70 días, descartó cualquier “connotación política” con el hecho, en relación con su paso por el gobierno provincial que condujo el electo senador nacional Raúl “Tato” Romero Feris. Asimismo, aseguró tener “la certeza” de que su hijo “todavía está con vida” y exhortó a las autoridades nacionales a “no escatimar ningún esfuerzo” para lograr la liberación del joven. En tanto, Pompeya Gómez, madre de Cristian, reconoció, durante una rueda de presos, a uno de los detenidos en la causa como la persona que cobró los 250 mil dólares que la familia pagó como rescate a principios de mes, en Ciudad del Este, Paraguay.
“Sé que está con vida en algún lugar ¿Qué sentido tendría quitarle la vida? Si hicimos todo lo que nos pidieron los secuestradores”, señaló Schaerer a Página/12. El ex funcionario provincial, que reside en Paraguay, donde se encuentra prófugo de la Justicia correntina, negó cualquier vinculación política con el hecho. “Se trata de un delito común, llevado a cabo por una banda de delincuentes muy organizada. Esto no tiene nada que ver con mi paso por la administración pública ni con la causa que me armaron”, remarcó. A su vez, le pidió al gobierno nacional que “haga todo lo posible por rescatar a Cristian”, ya que según manifestó, “la Justicia y la Policía de Corrientes no están capacitadas para tratar delitos tan complejos como los secuestros extorsivos”.
Pompeya Gómez, la madre del joven, identificó a uno de los detenidos del caso, cuyo nombre es Oscar Salgán, como la persona que recibió el rescate de un cuarto de millón de dólares, que ella misma abonó en la localidad paraguaya de Ciudad del Este. Al respecto, el fiscal del caso, Oscar Resoagli, consignó que “Salgán está vinculado con José Horacio Maidana”, oriundo de Paso de los Libres, y que es buscado por las autoridades como partícipe del secuestro.
El jueves, el fiscal dictó la libertad “por falta de mérito” a tres detenidos, una mujer de 64 años, cuñada del fallecido boxeador Carlos Monzón, y dos hermanos de la localidad misionera de San Javier, quienes alojaron a Néstor Barzuk, otro de los detenidos. Barzuk confesó su participación en el hecho y contó que el 9 de noviembre dejó a Cristian, con vida, en poder de Rodolfo Lormahn, sindicado como el líder de la organización que raptó al joven el pasado 21 de septiembre, y que permanece prófugo.