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Esta noche, durante la emisión de los programas Fútbol de Primera y Trato Hecho, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hará el lanzamiento de una campaña para promocionar, y exponer al debate, el plan de obras públicas en marcha, denominado en forma ambiciosa “Buenos Aires 10”, porque aspira a obtener la calificación perfecta. El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, sostuvo que el plan, que incluye las obras de remodelación de los hospitales de niños Pedro Elizalde y Ricardo Gutiérrez, la construcción de la nueva línea H de subterráneos, la extensión de otras redes existentes y la conclusión del plan hidráulico para mitigar el efecto de las inundaciones, tiene como objetivo central “transformar definitivamente el perfil urbano de la ciudad de Buenos Aires, poniendo en valor áreas estratégicas para mejorar la calidad de vida de las millones de personas que viven y de las millones que diariamente ingresan a Buenos Aires”. Las obras en materia de subtes, pavimentación, salud, cultura, educación y control de inundaciones, entre otros rubros, suponen una inversión total de casi 4700 millones de pesos en los próximos años.
“Buenos Aires 10 es la ciudad en la que queremos vivir en el año 2010”, dijo Ibarra al exponer los lineamientos centrales del plan, que en una primera etapa fue presentado, mediante nueve cuadernillos y un CD, a los editores de los principales medios periodísticos del país. “La crisis que comenzó en 2001 hace, todavía, que no haya mucha escucha cuando se habla de política”, explicó a Página/12 Daniel Rosso, subsecretario de Comunicación Social del gobierno porteño. A pesar de esa limitación, “hay que empezar a plantear un debate postcrisis, pero no a través de obras proyectadas sino de obras en ejecución que buscan transformar el perfil de la ciudad y sobre las cuales los vecinos tienen que opinar, a partir de recibir información sobre cómo invierte el dinero el Estado”.
El jefe de Gabinete, Raúl Fernández, sostuvo que la difusión masiva del plan tiene por objeto “establecer un marco de discusión” sobre las obras en marcha, habida cuenta de las críticas que suelen escucharse cuando se habla, por ejemplo, del estado de las calles y veredas de la ciudad. En ese sentido, Fernández aseguró que durante el primer semestre del año que viene se habrán solucionado “los problemas existentes en las zonas con mayores problemas”. En el primer semestre del año se rehabilitaron “unas 500 cuadras”, mientras que en los últimos cuatro años, el total de repavimentaciones suman 2932 cuadras, de las cuales 1088 fueron reparadas durante el año 2003. En los próximos tres años se hará “una inversión de 210 millones de pesos para continuar con esa tarea”, sostuvo Fernández, quien aclaró que sólo se mencionan “las obras ya licitadas y no las que todavía están en proceso de licitación”.
En el avance publicitario que se verá esta noche, los ejes serán las escuelas nuevas inauguradas en la ciudad, la extensión de la red de subterráneos, la necesidad de adaptar la capital a los requerimientos del creciente turismo proveniente del exterior o la simple idea de mejorar las instalaciones para niños en plazas y parques. El número 10 que se menciona en el Plan de Obras tiene que ver no sólo con la calificación ideal sino también con el 2010, año en el que se celebrará el bicentenario de la ciudad de Buenos Aires. En materia de subtes, se afirmó que en 2010 “dos de cada tres vecinos vivirán a menos de cinco cuadras de una estación” de la red. La nueva línea H será terminada en julio de 2005, con una inversión total de 714 millones de pesos.
El plan hidráulico tiene como eje principal la finalización de las obras del Canal Aliviador del arroyo Vega, que una vez terminado “protegerá a 300 mil vecinos” de los barrios de Devoto, Villa Pueyrredón, Villa Urquiza, Belgrano y Núñez. El material difundido por el gobierno porteño sostiene que el drenaje del arroyo, en su recorrido por avenida Monroe, desde Arribeños hasta el Río de la Plata, ya se incrementó “en un 60 por ciento” y cuando concluyan los trabajos, la infraestructura hidráulica podrá soportar “lluvias de alrededor de 40 milímetros por hora”. En materia de salud, el mayor objetivo es la reestructuración del Hospital Pedro Elizalde, con una inversión de casi 78 millones de pesos, mientras que en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez se hará un aporte de seis millones de pesos, para equipamiento y construcción de quirófanos. El jefe de Gabinete, Raúl Fernández, apuntó también que se realizarán “distintas obras que permitirán la apertura de centros de salud para atención primaria, en las zonas más carenciadas de la ciudad”. Antes de fin de año se producirá la inauguración de un centro de salud en el barrio de Mataderos, cerca de la villa conocida como Ciudad Oculta, que contará con cuarenta consultorios para consultas médicas.
En lo que respecta al área de educación, entre este año y el 2007, en el marco del Plan de Expansión y Renovación Edilicia, “se harán 73 nuevos emprendimientos destinados a satisfacer la demanda del sistema educativo público en todos los niveles”. En el primer semestre del año se habilitaron seis escuelas con capacidad para 1730 alumnos. La inversión total en la materia superó los 23 millones de pesos. Fernández anunció la creación de dos polos educativos, uno en Casa Amarilla y otro en Barracas, que significarán la inauguración de seis nuevas escuelas y un Centro de Formación Profesional. La inversión global, en los dos polos educativos, rondará los ocho millones de pesos.
En el plano cultural, los proyectos en marcha tienen relación, por un lado, con el Complejo Teatral Ciudad de Buenos Aires, que comprende a los teatros General San Martín, Presidente Alvear, Regio, De la Ribera y el Teatro Sarmiento. Las obras de reparación y mantenimiento requerirán una inversión total de 2,8 millones de pesos y tienen un plazo de ejecución de 48 meses. Otra de las obras de importancia tienen relación con el Teatro Colón, al cual se destinarán fondos por más de 30 millones de pesos. Entre otras cosas, se repararán las cubiertas de zinc del edificio y se mejorará el suministro de energía eléctrico. Una segunda etapa incluirá la restauración integral de la fachada del Colón y la actualización de la maquinaria escénica.