SOCIEDAD › POR PRIMERA VEZ, CREARON OVULOS A PARTIR DE CELULAS MADRE
El sueño de la fertilidad sin límite
Un grupo de científicos de EE.UU. desarrolló un óvulo a partir de células indiferenciadas del ovario humano. El avance pone en duda el principio de que cada mujer nace con un número limitado de óvulos. Entre otras aplicaciones, podría postergar 10 o 15 años la menopausia.
Por Pedro Lipcovich
Científicos de Estados Unidos consiguieron “inventar” óvulos a partir de células indiferenciadas del ovario humano. El resultado desafía un principio generalmente admitido por la medicina: el de que cada mujer nace con una cantidad de óvulos previamente determinada, constituidos durante la etapa fetal. Según estos investigadores, en el ovario de cada mujer habría células “madre” que, durante toda la vida fértil, podrían transformarse en óvulos. Las aplicaciones potenciales de este desarrollo –que aún está en sus primerísimas etapas– podrían llevar a obtener óvulos en mujeres que, con las técnicas actuales, carecen de estas células germinales, y mejoraría las chances de que mujeres que deben someterse a quimioterapia puedan, en un futuro, embarazarse por fertilización asistida. Hacia el final de su informe científico, los investigadores permiten que su fantasía vuele hacia un mundo donde su técnica permitiría a las mujeres postergar la menopausia diez o quince años –y por qué no para siempre– mediante la “colonización” de sus ovarios con óvulos nuevos.
El equipo de investigación, perteneciente a la Universidad de Tennessee y dirigido por Antonin Bukovsky, publicó sus conclusiones en la revista Reproductive Biology and Endocrinology. Los ovarios con los que trabajaron fueron obtenidos de mujeres que habían tenido que extirpárselos por indicaciones médicas y habían consentido expresamente en la utilización de los órganos para investigación. Eran cinco, de entre 39 y 52 años.
Según observan los autores, “el origen de los ovocitos (óvulos) en las hembras de mamíferos viene siendo tema de controversia durante los últimos cien años” y el “dogma” adoptado por la ciencia consiste en que “en las hembras de mamíferos, incluyendo las humanas, los ovocitos persisten desde el período fetal”. Sin embargo, “desde el punto de vista de la evolución, parece contradictorio que se haya desarrollado un mecanismo que requiere la preservación de estas células germinales durante varias décadas: un lapso tan prolongado podría propiciar la acumulación de alteraciones genéticas espontáneas o inducidas por el ambiente”. Es decir, a la especie misma le convendría que los óvulos pudieran generarse en la edad adulta y, según estos investigadores, es lo que pasa en realidad.
El equipo cita experiencias anteriores que habían detectado, en ovarios de ratones, células “madre”, stem cells indiferenciadas, quizá capaces de transformarse en óvulos. Para verificar esta posibilidad, ellos trabajaron con tejidos de la superficie del ovario humano: detectaron allí células madre que, cultivándolas en laboratorio, efectivamente se convirtieron en óvulos. Este desarrollo se produjo especialmente cuando el medio de cultivo tenía altas concentraciones de estrógenos: en la mujer, estas hormonas aumentan durante el período preovulatorio, lo cual alimenta la hipótesis de que, también en condiciones naturales, las células indiferenciadas del ovario se transformarían en óvulos maduros.
Los investigadores de Tennessee plantean que “la capacidad para producir óvulos maduros a partir de ovarios adultos in vitro tiene varias aplicaciones potenciales en reproducción humana y animal”. Mediante este método, la obtención de óvulos resultaría más fácil y en mayor cantidad. Y, “para fertilización asistida, esta técnica puede ser exitosa en mujeres con deficiencia ovárica prematura, que carecen de folículos (sitios donde se desarrollan los óvulos) en sus ovarios”.
Además, con esta técnica, “las stem cells de mujeres jóvenes pueden ser preservadas para la ulterior producción de óvulos: esto podría prevenir alteraciones genéticas fetales en embarazos a edad avanzada, posiblemente debidas a la falta de renovación folicular en los ovarios que envejecen”.
Pero la fantasía más osada de estos científicos es que “colonizar el ovario de mujeres premenopáusicas” con ovocitos jóvenes y otras células provenientes de las stem “puede resultar en un retraso de diez a doce años en la aparición de la menopausia”. El presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva, Claudio Chillik, estimó que los resultados de esta investigación, “aunque muy preliminares, son también muy interesantes”. Una eventual aplicación posible sería “obtener óvulos propios en mujeres que, dentro de los límites de las técnicas actuales, ya agotaron su propio patrimonio y sólo pueden lograr el embarazo mediante donación de óvulos”.
Otra aplicación potencial se referiría a mujeres que deben ser sometidas a quimioterapia, a las que, para poder tener hijos más adelante, se les extirpa y congela una parte del ovario a fin de preservar los óvulos: con la nueva técnica, “la misma pequeña porción de ovario daría más chances de células para un embarazo futuro”. En cuanto a la postergación de la menopausia, “parece demasiado hipotético”, admitió Chillik.