Las esculturas del tradicional paseo Caminito, en el barrio de La Boca, amanecieron devastadas. En total, cuatro obras fueron dañadas a golpes, sin contar los murales y monolitos que aparecieron pintados con graffitis. El gobierno porteño resolvió mejorar la iluminación de la zona y dotar al lugar de mayor vigilancia policial, durante las 24 horas. También estudian cerrar el pasaje durante la noche. La medida ya había sido sugerida hace un año por la Dirección de Museos porteña.

Todo ocurrió entre las 3 y las 4 de la madrugada de ayer. Las obras que resultaron severamente dañadas fueron las esculturas que homenajean a Juan de Dios Filiberto, autor de la música del tango Caminito, y a Gabino Coria Peñaloza, creador de la letra. La primera es una obra del escultor Luis Perlotti; la segunda, de Euzer Díaz. También fueron atacadas Elevando anclas, de Julio Vergottini, y El sembrador espiritual, de Antonio Sassone.

Las esculturas dañadas, fabricadas en un 90 por ciento en material cementicio, se encuentran sobre la peatonal Caminito, entre Garibaldi y Del Valle Iberlucea, un espacio que durante el día es visitado por centenares de turistas argentinos y extranjeros. Las obras fueron incorporadas al paseo tras su inauguración, el 18 de octubre de 1959.

El director de Espacios Verdes, área que depende del Ministerio de Espacio Público, Gustavo Roleri, explicó a Página/12 que “dos de las obras fueron destruidas casi en su totalidad, mientras que otra quedó parcialmente destrozada”.

El caso es investigado por la Fiscalía de La Boca y la Comisaría 24. “No sabemos quiénes fueron. La ministra de Espacios Públicos de la ciudad, Lía María, ya habló para custodiar durante las 24 horas”, informó Roleri. Y agregó: “Es el mismo pedido de comerciantes y vecinos de esa zona de La Boca. Hay alumbrado que vamos a ampliar, pero sin que se pierda la identidad del paseo”.

Roleri dijo además que ya se puso en marcha la restauración de las esculturas. Fuentes de la Secretaría de Cultura estimaron que el proceso demandará un tiempo prolongado. Durante el transcurso de la semana, en tanto, se limpiarán los grafitis.

En tanto, la directora general de Museos de la ciudad, Mónica Guariglio, recordó que “hace un año se hizo un relevamiento, a pedido de la Dirección de Turismo, que es la encargada de ese espacio”. En ese momento, relató, el restaurador Darío Klehr había tomado fotos de las obras que serán fundamentales para el trabajo de restauración. “El propio Klehr, que trabaja en el Museo de Esculturas Luis Perlotti, se encargó de recoger los pedazos de esculturas rotas y será quien se ocupe de la restauración”, informó Guariglio.

“Cuando se hizo el informe, habíamos recomendado a la Dirección de Turismo que ese espacio era muy oscuro, debía tener más iluminación, más vigilancia y el paseo tenía que estar cerrado”, sostuvo.

Por su parte, el historiador de Caminito y restaurador Guillermo Alió dijo que “desde hace tiempo se está pidiendo que haya una guardia permanente para evitar el ataque de patotas”.

Las obras pertenecen al Museo de Bellas Artes al Aire Libre Caminito, que depende de la Dirección de Turismo de la ciudad. Es que el tradicional pasaje es un centro de atracción para el turismo nacional y extranjero, donde se destaca la presencia de artistas callejeros y artesanos.