A pocas semanas de que un proyecto de ley contra el tabaco perdiera estado parlamentario en el Congreso de la Nación, el Ministerio de Salud difundió un relevamiento que revela el alcance del consumo pasivo del cigarrillo. Cerca del 60 por ciento de la población laboral argentina de entre 18 y 64 años está expuesta en forma cotidiana al humo del tabaco.

Estos datos fueron expuestos ayer por el director de Regulación y Fiscalización de la cartera de Salud, Guillermo Williams, en el marco de la IV Semana Argentina de Salud y Seguridad en el Trabajo que se está desarrollando en la ciudad de Buenos Aires.

“Es importante lograr más empresas libres de humo y municipios saludables”, destacó el funcionario. Luego, remarcó la necesidad de evaluar “todos los factores de riesgo ocupacionales, como el tabaquismo, el estrés y el medio ambiente laboral, en las estrategias de atención primaria de la salud en el trabajo”.

Según un informe de la Asociación Antitabáquica Sin Pucho (AASP), el humo del tabaco que penetra en los bronquios tiene sustancias tóxicas como cianuro de hidrógeno y acroelina. Esos tóxicos inhiben la actividad de las cilias, que son las encargadas de limpiar las sustancias nocivas del tracto respiratorio.

La presidenta de la organización, Raquel Fisch, indicó que “al prender un cigarrillo entran en combustión 4000 compuestos tóxicos, entre ellos el monóxido, que es causante de trombosis coronaria”. Además, recordó las cifras que dan cuenta de las pérdidas de vida que provoca: “El consumo de tabaco es responsable del 85 por ciento de las muertes por cáncer de pulmón, del 75 por ciento de bronquitis crónica y del 26 por ciento de los fallecimientos por enfermedades del corazón”. “La sociedad debe concientizarse que se produce una muerte cada 13 segundos en el mundo por el tabaco y el fumar disminuye el 30 por ciento el rendimiento físico laboral y deportivo”, agregó.

El relevamiento, realizado por la cartera sanitaria durante el año pasado, incluyó la opinión e información sobre los hábitos sanitarios de más de 40 mil personas mayores de 18 años que viven en poblaciones de más de cinco mil habitantes de distintos puntos del país. Para remarcar la importancia de la atención en el ámbito ocupacional, Williams señaló que “el 33,4 por ciento” de esa franja de la población en condiciones de desarrollar un empleo “se confiesa como consumidora de cigarrillos”.

Hace dos años, el ministro de Salud, Ginés González García, envió al Senado Nacional un proyecto de ley antitabaco que buscaba regular la comercialización y prohibir la publicidad del cigarrillo, pero nunca llegó al recinto debido a las presiones de las empresas tabacaleras.